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En la Unidad de Neumología del hospital Clínico de Valencia no conocen el significado de la palabra imposible. De hecho, su reto cotidiano que ha traspasado lindes autonómicos, fronteras continentales y distancias transoceánicas es lograr que aquellos que no pueden respirar, lo hagan y en ello ponen todo su empeño, conocimientos y técnicas. Al frente de este equipo que se ha ganado el reconocimiento internacional de los grandes popes de la neumología norteamericana se encuentra el doctor Emilio Servera.

La especialidad de este servicio es atender y dar calidad de vida a las personas que están con ventilación mecánica continua, que son los que dependen de un respirador para vivir y los que tienen dificultades mecánicas ocasionadas por un agotamiento de los músculos de la caja torácica.

En el acto de respirar se concentra el bello arte de vivir y el equipo del hospital Clínico es fuera de serie para sacar adelante los casos más difíciles, los casi desahuciados.

En su más difícil todavía, el servicio que lidera el doctor Servera empezó a trabajar con personas con esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y distrofias a quienes la evolución de la enfermedad les provoca una debilidad muscular importante que en ocasiones raya la parálisis. Para mantenerse vivo hay que mover la caja torácica, inhalar oxígeno para nutrir la sangre y exhalar carbónico, para que vuelva a iniciarse el ciclo. Sin exhalación no hay inhalación ni vida.

Músculos paralizados

Los especialistas de esta Unidad no solo tratan con los procedimientos más avanzados a los enfermos que lo requieren, sino que además son unos auténticos fuera de serie en atajar situaciones que de no resolverlas pueden devenir en asfixia, como es la extracción de la mucosidad que el paciente no puede arrojar por sus propios medios cuando los músculos están esclerotizados y no responden.

"Los músculos de la caja torácica también sirven para producir una tos efectiva y con el catarro se produce una inflamación, los cilios no están en condiciones, el moco se acumula y cuando el paciente es incapaz de toser porque tiene los músculos paralizados hay que ayudarle", afirma el doctor Servera.

Estas ayudas pueden ser mecánicas y manuales. La Unidad del hospital Clínico de Valencia tuvo la primera máquina que extraía la mucosidad y, con el tiempo, el equipo se ha convertido en uno de los grupos de trabajo más fuertes del mundo en la investigación y manejo de la secreción con procedimientos no invasivos. Los médicos de la Unidad son contrarios a practicar traqueostomías. Solo se hacen en casos muy concretos o si el enfermo lo pide expresamente.

"Ahora -añade el especialista- hay más gente con respiración mecánica en los domicilios que en las UCIs". El doctor Servera revela que por la noche respiramos menos al aumentar el nivel de carbónico y descender el de oxígeno.

En muchas ocasiones, su papel con los enfermos supera el límite de la ayuda y sustituye por completo la función de los músculos.

Cuando falta fuerza para toser

El especialista reseña que cuando se produce un cuadro de bronquitis crónica y se acumula la mucosidad, la única forma de expulsarla es con la tos, "pero para eso hace falta tener fuerza, hinchar el tórax y expulsarla y cuando esa fuerza falla, la suplimos con mascarillas que introducen el aire a presión y lo sacan a presión y esa presión hace fluir la secreción".

En la Unidad, los médicos estudian al paciente para averiguar en qué momento un enfermo de ELA va a ser incapaz de toser.

Las personas con ELA pueden sufrir daños en los músculos del cuello, que altera la deglución e impide cerrar la glotis. En estos casos hay que recurrir a las ayudas mecánicas, a mascarillas que se conectan a unos aparatos que les permite respirar sin acceder a la tráquea.

Para este grupo de pacientes, los neumólogos del hospital Clínico se convierten en sus dioses cotidianos porque también son unos grandes especialistas en evitar la formación de úlceras alrededor de la comisura de los labios.

Sus logros están recogidos en las mejores publicaciones del mundo (Chest y Lancet) y sus estudios sobre como manejar de forma no invasiva enfermos de gran complejidad son de referencia internacional.