Las alergias respiratorias afectan más a la población urbana que a la rural debido a que los altos niveles de polución de las grandes ciudades y la contaminación de los motores diesel provoca que los alergenos de los pólenes sean más agresivos, según afirmó ayer la directora de la Unidad de Alergología del Hospital Casa de Salud de Valencia, Valentina Gutiérrez.

Un estudio reciente concluye que al someter los pólenes a la influencia de partículas y material soluble de las emisiones de los motores diesel, el desarrollo del polen se altera, se hace gigante, irregular en su forma y se pela con la aparición de nuevos alergenos, lo que genera más casos de alergia al polen de plantas que tradicionalmente no se han considerado muy alergénicas, como el azahar y la palmera.

Las alergias respiratorias afectan más a la población urbana que a la rural en una relación aproximada de dos a uno tanto en niños como en adultos.

El cambio climático y la polución están favoreciendo el incremento de este tipo de afecciones, que son más frecuentes en los jóvenes que viven en la ciudad.

Los cambios climáticos debidos a la alternancia de episodios de frío y calor, así como el aumento medio de la temperatura media, favorecen el desarrollo de las alergias, pues hay polinizaciones sucesivas y el polen se concentra más en el aire.

Las alergias se definen como un «proceso inflamatorio que se produce por una reacción inmunológica anómala y excesiva a sustancias que están en el ambiente», según explicó la experta que indicó que su tratamiento sintomático consiste en usar agentes antiinflamatorios y antihistamínicos. También es necesario «anticiparse» a su aparición para realizar una prevención activa basada en el empleo de vacunas alergénicas.