Los accidentes de tráfico dejan anualmente un promedio de más de 150.000 personas —sobre todo población joven— con lesiones. Como consecuencia, los daños producidos son múltiples y variados, aunque en su mayoría de baja y media intensidad.
En este sentido, solo una atención temprana, profesional y personalizada ayuda a la rápida y total recuperación del accidentado en carretera.
Además, los incidentes circulatorios, debido a las fuerzas de aceleración y desaceleración, pueden producir lesiones agudas o complicar otras ya existentes. Por ello, la valoración e instauración de un tratamiento precoz es esencial para minimizar las secuelas físicas que se producen.
Desde el punto de vista médico, es imprescindible que todo individuo implicado en un accidente de tráfico acuda a una valoración médica urgente con indiferencia de la gravedad de los daños sufridos.
Lesiones más frecuentes en un accidente de tráfico
Las lesiones más frecuentes, en lo que a accidentes de tráfico se refiere, pueden variar en función del tipo de medio de transporte colisionado. Atendiendo a la catalogación de la doctora Eva Guisasola, jefa del Servicio de Rehabiltación Quirónsalud Valencia, estas son:
- Latigazo cervical. Afectación de uno o más elementos del cuello como consecuencia de una extensión brusca del mismo y, a continuación, una aceleración máxima hacia delante, dado que la inercia de la cabeza sobre la que no actúa ninguna fuerza se ve superada en el momento del impacto. Los síntomas más comunes de este tipo de lesión son el dolor cervical que aparece inmediatamente o poco después del accidente, limitación de la movilidad cervical, contracturas musculares, dolor de cabeza, mareos, acúfenos y, en algunos, casos parestesias u hormigueos en brazos. Esta lesión se produce, mayoritariamente, en los accidentes de coche.
- Traumatismos torácicos.
- Extremidades. Estas lesiones se producen, sobre todo, en los accidentes de moto, pues no existe chasis protector. Las más comunes son abrasión, fracturas de miembros superiores como muñeca o codo o, a su vez, en miembros inferiores como rodilla o tibia.
- Traumatismo craneoencefálico. Pueden provocar desde una simple conmoción cerebral a daños cerebrales adquiridos.
- Lesiones medulares. Pueden ocasionar una paraplejia o tetraplejia a la persona accidentada.
Unidad de Tráfico de Quirónsalud València
La Unidad de Tráfico de Quirónsalud València está compuesta por un equipo multidisciplinar entre los que se encuentran especialistas en traumatología, neurología, rehabilitación y fisioterapia, imprescindibles para la correcta recuperación de una persona lesionada en un accidente de tráfico.
“Las lesiones músculo-esqueléticas y medulares necesitan la implicación y coordinación de las diferentes especialidades que puedan necesitarse a lo largo de todo el proceso de recuperación, bien por curación, bien por estabilización de la lesión”, explica Guisasola, de Quirónsalud València.
La unidad, además, presta atención a pacientes —tanto adultos como pediátricos— que hayan sufrido un accidente de tráfico durante las 24 horas del día, los 365 días del año.
Asimismo, dispone de todos los recursos necesarios para ello. Desde un rápido acceso a servicios de apoyo —resonancia magnética, TAC, ecografía, laboratorio y quirófano— hasta un equipo que cumple unos requisitos funcionales y organizativos para una mayor tranquilidad y seguridad.
Es decir, cuenta con una asistencia sanitaria que incluye primera visita de Urgencias, hospitalización, pruebas diagnósticas, consultas con los diferentes especialistas, médico rehabilitador y tratamiento de rehabilitación, Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y, en caso de ser necesario, cirugía urgente.
Otro factor destacable de la unidad de Quirónsalud València es que su servicio puede ser solicitado por todo el mundo, por lo que no es necesario tener un seguro médico contratado.
De este modo, cualquier persona puede acudir directamente al servicio de Urgencias, donde el equipo administrativo se encargará de realizar todas las gestiones con la compañía aseguradora del vehículo colisionado, o bien llamar al número 96 104 19 09.
Tratamientos más habituales tras un accidente de coche
Respecto a los tratamientos tras sufrir un accidente de tráfico, la doctora Eva Guisasola se muestra tajante: deben ser integrales. “Hay que tratar el dolor con un manejo farmacológico y fisioterapéutico adecuado para conseguir una recuperación funcional”, afirma.
En el caso de los latigazos cervicales, que son las lesiones más frecuentes en este tipo de accidentes, el tratamiento descontracturante con masajes, así como la electroterapia y un programa específico de ejercicios para mejorar la postura y recuperar la movilidad son, como detalla, “claves”.
“Debemos individualizar los tratamientos”, puntualiza, aunque establece un tiempo promedio de recuperación de uno a dos meses en el caso de los latigazos cervicales o hasta seis meses en las lesiones de mayor gravedad.
¿Cómo se debe actuar ante un accidente de tráfico?
En función de la envergadura del accidente, existen diversos protocolos de actuación. Si la colisión es de gran envergadura, explica la doctora, “debemos esperar a que acuda la asistencia sanitaria al lugar del accidente”.
Por el contrario, si es leve, lo óptimo es acudir a un centro médico especializado que realice un examen exhaustivo de la persona accidentada para establecer un diagnóstico completo de las lesiones, su alcance y la indicación terapéutica adecuada en cada caso.
De no recurrir a un especialista médico, las consecuencias, advierte la especialista de Quirónsalud València, “podrían comprometer nuestras actividades diarias, laborales, sociales o deportivas”.
Y es que, se pueden experimentar secuelas de distinta índole, desde dolor crónico hasta lesiones neurológicas persistentes o limitaciones funcionales.
Más precaución en verano por las altas temperaturas
Casi el 20% de los accidentes de tráfico podrían deberse a excesivas temperaturas, según evidencian diversos estudios realizados por Prevensis, empresa especializada en el análisis del comportamiento de los conductores.
De hecho, cuando la temperatura de un coche alcanza los 30º C aumenta en un 20 % el riesgo de cometer errores durante la conducción y reduce en un 22% el tiempo de reacción.
Expertos de la Unidad de Tráfico de Quirónsalud València advierten que el calor afecta a las capacidades y al comportamiento del conductor. Como indican, “el exceso de temperatura que captamos en nuestra superficie corporal se transmite a una área de nuestro cerebro, el hipotálamo. Esta glándula, que además de regular nuestra temperatura corporal cumple otras funciones como control de nuestros estados de ánimo, modula el sueño y permite la capacidad de reacción ante ciertas circunstancias inesperadas”.
Así, establecen que “deberíamos evitar viajar durante las horas más calurosas, lo más recomendable es hacerlo a primera hora de la mañana o a última de la tarde, pero siempre con luz diurna”.
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