Según cifras de ese organismo del Gobierno de EE. UU., entre 2003-2004 y 2005-2006, el 32 por ciento de los niños del país padecían sobrepeso u obesidad, una cifra que se estabilizó después de aumentar sin interrupción desde 1980.

El director de la clínica de obesidad del Hospital de Boston, David Ludwig, señaló que "este es un hallazgo alentador en un tema que generaba incansablemente malas noticias".

"Sin embargo, todavía es pronto para determinar si estamos en el inicio de nuevos avances en esta epidemia. Podría ser simplemente una casualidad estadística", manifestó.

Algunos expertos anotan que si la estabilización de la obesidad infantil es real, podría deberse al esfuerzo de padres y centros educativos para mejorar las dietas de los niños y fomentar el ejercicio.

El problema del exceso de peso o la obesidad en la población estadounidense se ha convertido en un grave problema de salud debido a que se le vincula directamente con el aumento de las enfermedades cardiovasculares, la diabetes y hasta algunos casos de cáncer.