"Il Cavalieri" Silvio Berlusconi ha sido el último en sumarse al club de los divorcios más caros de la historia. Es el "peaje" que los multimillonarios tienen que pagar por romper su matrimonio, un precio que cotiza al alza cuando hay terceras personas de por medio. El actor Mel Gibson ha tenido que poner a la venta su patrimonio artístico para pagar a su ex esposa.

Fuera de concurso se sitúan dos magnates mundiales: el petrolero ruso y propietario del Chelsea Roman Abramovich tuvo que desprenderse de 1.345 millones de euros. Más o menos la misma cantidad que el "rey" de la comunicación Robert Murdoch.En cuanto a los casos más recientes, el patrón de la Fórmula 1 el que va en cabeza. Bernie Ecclestone, que tiene una fortuna estimada de 3.000 millones, ha pagado recientemente 670 de ellos a la ex modelo croata Slavica Radic, 28 años menor y madre de sus dos hijas. Le sigue de cerca Tiger Woods. La traducción en cifras de las múltiples infidelidades aireadas y la ruidosa ruptura del golfista con Elin Norgedren puede rondar los 400 ó 500 millones de euros.

La prestigiosa revista estadounidense Forbes elabora listas de divorcios costosos. Entre los más sonados se encuentran la ex estrellade la NBA Michael Jordan (118 millones de euros, la mitad de su fortuna), actores como Mel Gibson, Harrison Ford, Kevin Costner o Michael Douglas o los cantantes Paul McCartney y Mick Jagger.

En España, están los casos de los Albertos. Alberto Cortina Alcocer y su primo Alberto Alcocer se casaron y se divorciaron de las hermanas Alicia y Esther Koplowitz. El acuerdo las puso a ellas al frente del grupo empresarial que más tarde se convertiría en FCC. Otro "imperio" se repartieron Amancio Ortega y Rosalía Mera. Aunque el presidente de Inditex conservó el control de la compañía, su ex esposa se mantiene como una de las accionistas principales de la empresa.

El pacto entre Silvio Berlusconi y su segunda esposa ha supuesto menos dinero del pedido inicialmente. Verónica Lario recibirá 300.000 euros al mes.