La II Guerra Mundial marcó el fin de "los buenos viejos tiempos" de las primeras competiciones de bólidos. Pero dejó un récord todavía imbatido: el Bugatti 35 ganó 1.800 pruebas en cuatro años. Aquel mítico Bugatti, y muchos otros, pueden contemplarse desde ayer y hasta el 27 de junio, en Valencia, en El Corte Inglés de la avenida de Francia. Sólo que a escala 1:18.

José María Verduch lleva quince años reuniendo maquetas. Hasta medio centenar, que serían alrededor de 700 de no haber sido por el robo que sufrió hace un par de años en el almacén donde guarda los embalajes originales. Eran modelos americanos de los 50 y los 60. Más tarde supo que se habían malvendido en el rastro. "El 99,9% están fabricados en China -explica este coleccionista- pero son primeras marcas, muy exclusivas, muchas de ellas series numeradas". Ocupan gran parte de su tiempo, de su presupuesto (aunque Verduch se niega a hablar de cifras) y de las vitrinas de su casa.

En la muestra -es la primera vez que expone su colección privada, a petición del comisario de la misma, Francisco Pérez Puche- hay un grupo de coches de carreras antiguos, desde 1920 hasta 1940; un segundo apartado destinado a la Fórmula 1 -la exposición coincide con la competición en el circuito urbano de Valencia- que abarca desde los vehículos de los años 50 a los que se proclamaron campeones en el Gran Premio el año pasado pasando por los clásicos (los que pilotaban Fangio, Alain Prost o Niki Lauda) y un tercer bloque temático centrado en los Ferrari (18 Ferraris, desde 1947 hasta el modelo California).

En casa de Verduch hay muchas más piezas. Series enteras de Mercedes, BMW, Porsche o Lamborghinis, de todas las épocas. La exposición, insiste, es para él "una cuestión muy puntual". Montarla es complicado debido, señala, a lo delicado de las maquetas. Ayer se inauguró la muestra, acompañada por fotos de la primera carrera urbana de coches que se celebró en el Grao de Valencia hace cien años.