Mariano Tomás Benítez (Hellín, Albacete, 1946) ha sido juez de profesión -y de los conocidos, a su pesar, como cuando asumió el caso de las niñas de Alcàsser-, pero su pasión reconocida son los toros. Y Joselito, ante todo, al que siguió durante años. Fruto de esa afición han sido numerosos textos y conferencias, que ahora ven la luz reunidos por primera vez en el libro Mariano Tomás Benítez: escritos taurinos, realizado por el colaborador de Levante-EMV Enrique Amat.

El volumen ha sido editado en la colección Letra y Toro de la Diputación de Valencia. Tiene 389 páginas e incluye una biografía de Mariano Tomás seguida de un estudio de su producción literaria taurina clasificada en cuatro apartados: el escritor, el conferenciante, el periodista y el jurista y aficionado.

El magistrado fue colaborador durante los años noventa de este diario, donde firmó una sección titulada El toreaje (homenaje a la expresión taurina bautizada por Ramón Gómez de la Serna). El libro de Enrique Amat, que será presentado el próximo miércoles en La Beneficència (19.30 horas), contiene una antología de estos artículos, publicados hasta 1996.

El nombre de Mariano Tomás se hizo muy conocido a raíz del caso Alcàsser. Tras una etapa en Madrid, el jurista manchego pasó en 1990 por voluntad propia a la Audiencia Provincial de Valencia, donde ejerció como presidente de la Sección Segunda de la misma. De esta manera, tuvo que ejercer de presidente del tribunal que juzgó la desaparición y muerte de las tres niñas.

La producción taurina de Tomás se remonta a 1977, cuando publicó Apuntes sobre la legislación taurina. Sus obras más recientes son de 2005: Las claves de la tauromaquia y Granero y su tiempo.

Como conferenciante, Mariano Tomás ha ejercido en foros como Valencia, Castelló, Albacete, Madrid o Córdoba.