El conductor acusado del accidente que ocasionó graves heridas a Ana Torroja y Esther Arroyo y la muerte de un amigo que viajaba con ellas fue ayer condenado al pago de una multa de 360 euros en un juicio en el que las artistas han asegurado que las secuelas de aquel siniestro han cambiado sus vidas.

Casi seis años después del trágico accidente, ocurrido el 10 de octubre de 2008 en la carretera N-340, cerca de Vejer de la Frontera (Cádiz), el caso fue ayer juzgado en una vista que duró más de seis horas. En él Esther Arroyo, que a consecuencia de las heridas tuvo que acogerse a la incapacidad laboral permanente, reclamó casi seis millones de euros, una cantidad que el fiscal del caso redujo a 494.541 euros, algo menos de lo que solicita para Ana Torroja. Al margen de la discusión sobre las indemnizaciones, todas las partes acordaron reducir la petición de condena para el acusado, para quien en principio el fiscal solicitaba tres años y medio prisión.

En una sentencia de conformidad el conductor ha aceptado una pena de 360 euros y la retirada del permiso de conducir como autor de un delito de falta por imprudencia leve con resultado de muerte y cinco faltas por imprudencia leve con resultado de lesiones, por los cinco heridos en el accidente, las dos artistas, sus parejas y un amigo.