La presentación de este bolso made in Vinaròs se celebró la noche del jueves en la capital aragonesa durante la presentación de la colección de otoño-invierno de Urban VicArt. Este bolso joya de madera ha desbancado a un Chanel y está valorado por la firma aragonesa en 320.000 euros, explicó Gonzalvo en su taller de Vinaròs.
«Surgió como una colaboración con la firma Urban VicArt, en un principio la idea era incrustar en un bolso de madera las iniciales de la cliente en oro, pero entonces se me ocurrió el por qué en vez de incrustar el nombre no hacíamos un adorno en oro y enriquecíamos más el bolso», dijo Gonzalvo. Pero la idea fue a más, «y después dije ya que estamos por qué no hacemos el bolso más caro del mundo y además del oro incrustamos diamantes, rubíes y esmeraldas. A ellos les gusto y empezamos a trabajar en el proyecto». Gonzalvo detalló que «ellos me mandaron unos diseños y yo los adapte hasta que salió este bolso que ha desbancado a un Chanel, lo cual es un orgullo». El joyero reconocía que «este bolso es muy difícil que se venda».
Asimismo, indicaba que «ha sido un ejercicio de diseño conjunto adornando un bolso y demostrando que sobre la más humilde de las maderas, el bolso es de arce, se puede poner una joya».
El bolso lleva 91 brillantes, de los cuales hay 45 de dos milímetros y medio, «hay uno que pesa un quilate sesenta, ya es un diamante bastante importante, lleva dos piedras de medio quilate y también lleva tres piedras de cero cuarenta de quilate. El resto son rubíes y esmeraldas para darle color». La estructura del bolso es de madera de arce maciza.
Para hacer esta obra de arte, el joyero empleó mes y medio, «incluidos fines de semana, a nueve horas diarias, ha sido una auténtica locura el ir incrustando el oro y las piedras, pero ha valido la pena». En la presentación de este bolso joya en Zaragoza había otros dos que llevaban sólo motivos incrustados en oro diseñados también por el propio Gonzalvo.
Gonzalvo es conocido por ser el diseñador y autor de los reconocimientos Grinyò Ballester que cada año entrega el Ayuntamiento de Vinaròs. También ha restaurado varias piezas del tesoro de la iglesia arciprestal de la localidad, como cálices, relicarios o elaborado una palma para la imagen de Santa Bárbara, del siglo XVII.
Su próximo reto es hacer alguna joya para novias, «es algo que he tocado muy poco, la idea es hacer algo combinando nácar blanco y madera o hacer joyas con marfil y nácar blanco que para una novia quedarían fantásticas». Gonzalvo explicaba que «al estar prohibido el marfil de elefante utilizo de mamut, que lo consigo a través de una empresa de fuera de España, es exactamente igual pero como es una especie extinguida no está sujeto a las leyes del CITES».
El bolso está expuesto en su taller de la calle San Francisco de Vinaròs mientras Gonzalvo sigue trabajando en sus nuevos proyectos.
