Durante la ceremonia, ayer, de entrega del Premio Cervantes 2014 al escritor barcelonés Juan Goytisolo la reina Letizia «escondió» su nueva corta melena bob gracias a un moño postizo.

La reina volvió a apostar por su diseñador de cabecera, Felipe Varela, luciendo un vestido en rojo intenso que ya se le pudo ver en el transcurso de su visita a Guillermo y Máxima de Holanda. El vestido estaba formado por un tímido escote de pico con botonadura central y bordados florales en la manga derecha y el lateral izquierdo de la falda. Un look que completó con unos salones del mismo color de la firma alicantina Magrit, habitual en su fondo de armario, y una cartera-sobre.

Para su pelo, uno de los temas más comentados del momento, Letizia optó por un recogido desenfadado con postizo. Era su tercera aparición pública desde que sorprendiera el lunes por la noche en la fiesta de entrega de los premios de la revista Woman con su nueva imagen, y la primera en un acto formal y de carácter cultural.

Precisamente, desde su corte de pelo muchos expertos habían especulado acerca de cómo resolvería la reina su peinado en galas de mucho protocolo, en las que las mujeres de la realeza suelen optar por recogidos, especialmente en el caso de usar tiaras. Letizia estrenó recientemente la que le regaló Felipe VI.