El cantautor Antonio Orozco ofreció el pasado lunes un concierto inédito, ya que actuó en el laboratorio de fecundación in vitro del Instituto Marqués de Barcelona para los 380 embriones que en esos momentos estaban en las incubadoras de esta clínica especializada en reproducción asistida.

El concierto, en el que Orozco, que actuó con su guitarra, se colocó bata y gorro de médico, responde a una investigación llevada a cabo por este centro sanitario que ha concluido que la música beneficia el desarrollo embrionario y fetal.

Fuentes del Instituto Marqués han explicado que el concierto de Antonio comenzó con la canción «Estoy hecho de pedacitos de ti» y continuó con sus éxitos «Devuélveme la vida» y «Tres corazones», las mismas canciones que interpreta en la gira que el cantante ha iniciado este verano por España denominada «Origen».

Un estudio presentado hace dos años en la reunión anual de la Sociedad Europea de Reproducción Asistida (ESHRE), demostró que las vibraciones musicales aumentan un 5 % la tasa de éxito de la fecundación in vitro y mejoran el desarrollo embrionario.

Tras esta conclusión, el centro sanitario barcelonés desarrolló un método que incluye incorporar música en todas las incubadoras de embriones.

Por su parte, el cantante, que aseguró haber vivido una de las experiencias más especiales de su vida, ha recordado que la música es una de las formas más primitivas de comunicación humana.

«Me parece maravilloso que la doctora López-Teijón y su equipo apliquen este principio a su investigación y consideren que la música ha de formar parte de la vida desde el primer día», dijo.