El propietario del coto de caza en el que vivía el león Cecil, Honest Ndlovu, ha sido acusado por un tribunal de Zimbabue por permitir que el turista estadounidense Walter Palmer matase ilegalmente al animal en su propiedad, según ha informado su abogado, Tonderai Mukuku.

Ndlovu ha sido imputado por permitir que "una persona que no es residente habitual en Zimbabue cazara a dicho animal, que no formaba parte de su cuota de caza". Su abogado ha asegurado que Ndlovu ha negado los cargos y ha sido puesto en libertad bajo fianza de 200 dólares (unos 180 euros).

Ndlovu, dueño del Parque Nacional de Hwange desde donde el león fue atraído y matado por un arco empuñado por Palmer, tendrá que volver a los tribunales el 18 de septiembre.

El mismo tribunal que lleva el caso de Hwange pospuso la semana pasada el juicio del cazador local Theo Bronkhorst hasta el 28 de septiembre. Bronkhorst, que fue guía de Palmer, está acusado de no impedir que el estadounidense matara a Cecil.

Las autoridades de Zimbabue piden que Palmer sea extraditado desde Estados Unidos para que sea juzgado por la matanza de Cecil, un longevo león de 13 años y una popular atracción turística. El incidente ha causado consternación global y ha provocado una importante reacción en contra de la multimillonaria industria de la caza en África.