El interés de la reina Letizia por mantener una alimentación sana es de sobra conocido. Mucho se ha hablado de las dietas que sigue la esposa de Felipe VI, como la Perricone. En esta línea por cuidar lo que come, la reina comenzó la semana en la presidencia en el Seminario sobre Nutrigenómica, como Embajadora Especial de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura para la Nutrición, en un acto celebrado en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas de Madrid.
La reina acudía a este seminario para ampliar sus conocimientos sobre nutrición y prevenir las enfermedades más comunes en el adulto y conocer más sobre el efecto de los nutrientes sobre el genoma y el proteoma. En concreto, la madre de la princesa de Asturias asistió a conferencias sobre bacterias y obesidad infantil, la relación de la alimentación con la salud, la obesidad y síndrome metabólico en la infancia o sobre la búsqueda de una alimentación óptima para los niños.
Seguidora de la famosa dieta Perricone, siempre ha estado muy pendiente de la alimentación y las primeras que lo saben son sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía. De hecho la hija mayor de los monarcas recordaba un día que su madre les hacía comer brócoli, incluso en cierta ocasión Leonor comentó siendo muy pequeña a su hermana Sofía que tenía que comer verduras, «que tienen antioxidantes».
De hecho esta no es la primera intervención de la reina en temas de alimentación ya que desde junio es embajadora para la Nutrición de la FAO, se centra en nuevos métodos de ayuda y sobre todo, de concienciación para evitar que crezcan las enfermedades relacionadas con la nutrición. La mujer de Felipe VI también ha hablado de temas de nutrición con la primera dama de Estados Unidos en su reciente encuentro en la Casa Blanca donde ambas son grandes aficionadas a los huertos ecológicos.
