«Aquí estoy haciendo cosas que como arquitecto sólo podía soñar», explica Carlos Bausá. Y no es para menos porque este arquitecto, que terminó sus estudios en la Universidad de Alicante en 2013, lleva año y medio trabajando en el estudio Foster and Partners, en Londres.

Nacido en Palma pero residente en Alicante junto a su familia desde que empezó la carrera, Bausá pertenece a la división de Specialist Modeling Group, compuesta por 20 personas, en la que su misión es ser Environmental Design Analyst. Traducido significa que aplica las técnicas de análisis solar a la construcción de edificios, es decir, «analizo cómo el sol va a incidir en un edificio para poder mejorar sus condiciones tanto en el consumo energético como en la habitabilidad de sus usuarios mediante algoritmos y programación», señala. Dentro de su división, otros compañeros realizan la misma labor con la temperatura y la acústica, de manera que se implican en gran parte de los proyectos que salen de este prestigioso estudio.

Ahora, Bausá se encuentra inmerso en la remodelación de las tiendas del gigante Apple alrededor del mundo en una segunda vertiente de su labor más vinculada al diseño. «Ya estuve con una de Singapur y ahora trabajo en la de Nueva York», desvela. Obviamente no puede contar mucho más puesto que este tipo de contratos entre multinacionales se firman con cláusulas de confidencialidad, pero sí avanza que «clientes como Apple quieren que sus establecimientos sean minimalistas y limpios pero con elementos sorprendentes». Para Bausá, esta experiencia ha supuesto todo un reto. «Sacar adelante ideas para este proyecto utilizando tu especialidad pero también otras disciplinas distintas es increíble y un placer intelectual impresionante. Me han dado mucha libertad para investigar y he aprendido muchísimo».

Esa curiosidad intelectual, que según admite le despertó en gran medida el coordinador internacional de la titulación de Arquitectura en la UA, Javier Sánchez Merina, fue la que le llevó a especializarse en diseño paramétrico, que consiste en diseñar con datos mediante un programa de geometría. Según explica «simplifica las cosas cuando tienes miles de piezas que deben ser modificadas en poco tiempo. Sólo debes ajustar los parámetros que desees y el edificio entero cambia de manera automática ».

«Siempre me ha gustado programar y también inventar aparatos y pensé que esta especialización tenía futuro tras realizar un curso en la universidad», recuerda Bausá. Está claro que no se equivocó porque esa especialización que completó en Barcelona con un master terminó abriéndole las puertas para entrar en Newtecnic en Londres, empresa que diseñaba las fachadas de la prestigiosa arquitecta iraní Zaha Hadid.

Ahora, Bausá quiere «aprovechar al máximo esta experiencia porque estar en un estudio como éste es estar en otro nivel». Pero en un futuro le gustaría volver a Alicante o a Barcelona con su mujer, también arquitecta, y montar su propio estudio, a través del cual se plantea formar a otros profesionales con las últimas técnicas arquitectónicas de los grandes estudios.