El artículo que está causando verdadero furor entre los jóvenes no es, por extraño que parezca, ni un móvil ni otro dispositivo electrónico. La moda ahora es el 'Fidget Spinner', como en su día lo fueron las gomitas de colores, las peonzas, los tazos o el cubo de Rubik. Se trata de un juguete con unas aspas que giran a gran velocidad si aprietas un botón. Algunos colegios se están planteando prohibirlos para evitar distracciones.

Los 'Fidget Spinner' existen desde hace años para reducir el estrés. Originalmente, se diseñaron para ayudar a los niños con autismo o trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH).

Pero ha sido ahora cuando han empezado a popularizarse. Los hay de todo tipo de formas y colores, y a precios que van desde menos de un euro hasta los más de 2.000 que cuestan algunos exclusivos modelos.

En YouTube hay también numerosos tutoriales que explican las cosas que se pueden hacer con ellos. La fiebre es tal que la demanda de los 'Spinner' se ha disparado un 150% en las últimas semanas.

Pero como todo juguete que se populariza, la controversia ha llegado los colegios. Hay quienes ven a los 'Spinner' como un producto que ayuda a mejorar la concentración de los niños, mientras que otros lo consideran un elemento de distracción en clase. Por ello, algunos colegios de EEUU y el Reino Unido quieren prohibirlos.