Oxfam Intermón y Unicef Comité Español han presentado el informe «España frente a los retos de la Agenda de Desarrollo Sostenible», que propone medidas a los partidos políticos para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible

La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible que se aprueba en la Asamblea General de Naciones Unidas, del 25 al 27 de septiembre, establece un programa de acción que, por primera vez, compromete a todos los países del mundo a cumplir unas metas durante los próximos quince años.

La universalidad de la agenda obliga a España a cumplir con estos objetivos y con sus metas y su punto de partida no es muy alentador. En 2014 el 29,2 % de la población española estaba en riesgo de pobreza y exclusión social; de ellos un 35,8% eran menores de 18 años, según datos oficiales. Las medidas de austeridad realizadas en salud y educación han tenido un impacto negativo, en particular en los grupos más vulnerables. La brecha salarial de género es de las mayores de la Unión Europea y la implementación del protocolo de Kioto en la emisión de gases invernadero ha tenido un débil recorrido. Además, España está a la cola del Comité de Ayuda al Desarrollo por la estrepitosa caída de la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD) a solo el 0,14 por ciento del PIB.

Según el informe, España debería reducir a la mitad los niveles de pobreza para 2030, respecto a los del año 2000, y alcanzar la meta de menos de 5 millones de personas en riesgo de pobreza y exclusión social para poder cumplir con la agenda de Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Ambas organizaciones proponen para ello medidas como el establecimiento de un sistema de garantía de unos ingresos mínimos para que los hogares y personas que lo necesiten puedan cubrir sus necesidades básicas

La Agenda 2030 plantea por primera vez un objetivo de reducción de la desigualdad que todos los países deben alcanzar y que supone que para el año 2030 un país como España debe conseguir que el 40%de la población más pobre tenga más riqueza que el 10% de la población más rica. Para lograrlo, las organizaciones proponen medidas fiscales progresivas donde paguen más los ricos y las grandes empresas, y medidas salariales orientadas a reducir la brecha salarial entre los salarios más altos, los medios y los bajos.

La obligación de España

España también tiene el deber de asegurar que los países en desarrollo cuentan con los recursos y las políticas que faciliten el cumplimiento de esta Agenda, por lo que tiene que poner en marcha medidas para luchar contra la pobreza, la desigualdad y por la sostenibilidad fuera de nuestras fronteras. Por tanto, debe revertir el proceso de debilitamiento de la política de cooperación para el desarrollo, tan esencial para la consecución de los ODS en los países en desarrollo. El ODS 17 establece la necesidad de incrementar la ayuda al desarrollo hasta el 0,7 % del PIB.