Tradiciones hay muchas en Navidad, pero la que convoca cada inicio de diciembre la ONG Ajuda als Pobles se ha convertido en una más en Quart de Poblet. El Rastrillo Solidario que monta en cada período invernal esta entidad solidaria cumple este año su vigésimoprimera edición. Y ni siquiera las fuertes lluvias han podido vencer el deseo de cooperar de los miembros de Ajuda als Pobles, que aunque cambiaron su ubicación a causa del temporal, celebraron durante este fin de semana „y continuarán durante los próximos días„ este mercado en su sede de la calle Doctor José Sarrió de Quart de Poblet.
Además de estas semanas previas a las fiestas navideñas, el rastrillo permanecerá también abierto en la Feria de Navidad que el Ayuntamiento de Quart organiza los días 28 y 29 de diciembre. En este mercado, los visitantes pueden adquirir libros, juguetes, peluches, plantas navideñas... y, sobre todo, el producto estrella: artesanía procedente del Sahara. Precisamente allí van dirigidos íntegramente los fondos que recauda la ONG.
Ajuda als Pobles destina las ganancias de esta iniciativa a proyectos de cooperación internacional en el Sahara. Concretamente, tienen dos guarderías que mantienen de forma anual en Guelta, con quien Quart de Poblet está hermanada. Asimismo, parte de los fondos van destinados al dispensario de esa misma localidad y el hospital regional de El Aaiún. «Mandamos ayuda sobre todo en materia sanitaria y de educación», reafirma Ester Montalbán, secretaria de la ONG.
Ahora, uno de los objetivos de Ajuda als Pobles es ampliar su rango de acción al campamento de Dajla, «el más afectado por las últimas lluvias y el que menos recibe de las organizaciones internacionales», señala Montalbán.
Proyectos sin mantenimiento
Ester Montalbán viajó recientemente con otros tres integrantes de Ajuda als Pobles para ver el funcionamiento de los proyectos que financian y, allí, se llevó una sorpresa: «Nos hemos dado cuenta de que la gente inicia proyectos, pero luego no los mantiene. Por ejemplo, había huertos con un sistema de riego perfecto y que luego estaban abandonados». Por ello, insisten en la necesidad de mantener su compromiso a mantener sus proyectos en el hospital de El Aaiún y las guarderías de Guelta. No solo consiste en iniciar el proyecto, sino en continuarlo y darle seguimiento.
Por otra parte, Montalbán recordó los problemas que provocan las minas existentes en el muro que separa el Sahara Occidental de los campamentos saharauis, que debido a las lluvias han sido arrastradas a la zona poblada provocando mutilaciones y víctimas entres sus habitantes.
