¿Cuál es la función de una defensora de los derechos humanos?

Acompañamos, asesoramos y en algunos casos representamos jurídicamente a víctimas de violaciones a derechos humanos. También hacemos seguimiento y cabildeo de la situación de derechos humanos en las regiones y buscamos que se hagan investigaciones para que estos casos no queden en la impunidad. Objetivo es visibilizar y denunciar las situaciones de violaciones a derechos humanos y a derecho internacional humanitario.

¿Cómo ves el proceso de paz de Colombia, cómo afecta a los derechos humanos?

Veo con buenos ojos que el Estado y las organizaciones rebeldes se sienten a buscar una salida pacífica. Sin embargo, considero que para el logro de la paz se deben superar las causas estructurales que han generado el conflicto armado, hay que ir más allá del silenciamiento de los fusiles. Mientras sigan las desigualdades y los intereses económicos que interponen el dinero al bienestar de las comunidades, se van a seguir generando conflictos. Aunque ya no hay prácticamente muertos de combate, se ha visto un aumento de la represión contra el movimiento social y estructuras paramilitares están asesinando a dirigentes sociales, ya llevan 130 desde la firma de los acuerdos de paz. Esto lo hacen para aterrorizar y evitar que el pueblo organizado se resista a la entrada de empresas transnacionales.

¿El gobierno de Santos pone en marcha políticas para garantizar los derechos humanos?

El tema de la represión viene directamente del Estado a través de la legislación. La ley Zidres, por ejemplo, legaliza el despojo de los territorios de campesinos por parte de los paramilitares y las empresas transnacionales. No hay muchos intereses de ayudar, el Gobierno está al tanto de favorecer los intereses económicos del capital transnacional y de la burguesía colombiana y no garantiza condiciones de vida digna para la gente.

Entonces, ¿la paz es «artificial»?

Es tímida digamos. No va a las raíces del problema como tal. Las causas que generaron y que mantienen ese conflicto armado no se han tocado y eso es lo que la sociedad civil y las organizaciones sociales estamos exigiendo. Es necesario que se revisen las causas que mantienen el conflicto si queremos avanzar hacia la construcción de paz.

Se habla de post-conflicto, de proceso de paz...todos estos términos ¿son sinónimos de búsqueda de la paz?

Es todo una estrategia publicitaria de comunicación que ha implementado el Gobierno para cambiar la imagen que había de cara a la comunidad internacional. De pasar de un estado violador de derechos humanos a tener una imagen de garantista y protector de estos. Eso hace que se camufle la situación real. Si todo el mundo habla de que en Colombia estamos en paz y postconflicto se deja de hacer seguimiento a lo que está pasando. Nosotros queremos traer el mensaje de las comunidades de Colombia y de la situación real que se vive para que sea la comunidad internacional la que también ayude a hacer un seguimiento y un juicio más aterrizado de lo que está pasando.

¿Qué percepción tiene la población de lo que está pasando?

Los medios de comunicación juegan un papel muy importante en el juicio que tiene la población. A nivel internacional se cree que estamos viviendo en postconflicto y los medios de comunicación nacionales que más llegan a la población, dan la misma percepción y dejan de mostrar la realidad colombiana para distraer con realidades como la situación de Venezuela. Entonces se maximiza la situación de derechos humanos en Venezuela pero no se revisa lo que está pasando en los territorios. En ese sentido pues nosotros tenemos nuestros propios medios comunitarios para intentar llevar otra visión de lo que está pasando.

¿Cuál es la solución?

Está en una voluntad real, por parte de todos de vivir en paz. Estamos esperando a ver como se sigue dando el tema de los acuerdos. La solución más rápida no la tenemos, no vemos que la cuestión vaya a mejorar porque cada día vemos como se violan los derechos humanos. Sin embargo, está la intención y la disposición de las comunidades de poner las propuestas a la orden del día para la discusión con el Gobierno.