T. Domínguez, Valencia

Agentes de la Policía Local de Valencia han desmantelado en una casa del barrio de Campanar un taller textil clandestino en cuyo interior fueron sorprendidos trabajando ocho ciudadanos chinos. Según fuentes municipales, dos de ellos, los encargados, han sido detenidos por un presunto delito contra los trabajadores, mientras que los seis restantes, que estaban utilizando en ese momento parte de las máquinas de coser, lo han sido por infracción a la ley de extranjería, ya que carecen de documentación legal para residir en España.

La fábrica ilegal de prendas de vestir fue descubierta sobre las once y media de la mañana de ayer, después de que varios vecinos vinieran denunciando la existencia del centro de trabajo clandestino. Agentes de la Unidad del Grupo Operativo Especial de Seguridad (GOES) de la Policía Local de Valencia acudieron a la casa, ubicada en el número 10 de la calle del Maestro Bagant y que consta de una planta baja y un primer piso, al saber que había actividad en ese momento.

Al llegar, encontraron dentro a los dos encargados -un matrimonio chino que ronda la treintena- y a seis trabajadores ilegales. El encargado, según las citadas fuentes, trató de agredir a los policías, por lo que éstos tuvieron que reducirle y colocarle las esposas.

Vivían en condiciones inadecuadas

Al parecer, la pareja había alquilado la vivienda a otro matrimonio y en ella no sólo se fabricaban las prendas sin autorización de ningún tipo, sino que además vivían de forma permanente y en condiciones poco adecuadas tanto los encargados, como los seis trabajadores detenidos -tres hombres y tres mujeres de entre 30 y 40 años-.

Fuentes policiales explicaron que existe la sospecha de que hubiese más trabajadores que en ese momento estuviesen ausentes, ya que los agentes contaron doce máquinas textiles, por lo que se cree que podría haber, al menos, entre cuatro y seis empleados clandestinos más.

La planta baja era la zona dedicada a vivienda -utilizaban cartones a modo de tabique improvisado para compartimentar los dormitorios-, mientras que en la primera planta estaban ubicadas las máquinas, así como la cocina y un cuarto de baño que utilizaban todos ellos.