Un joven de 30 años resultó ayer herido grave tras clavarse el manillar de su bicicleta en el abdomen cuando practicaba "skatebike" en la pista de patinaje de Onda. Según los testigos del suceso, el accidente se produjo cuando, durante la caída tras un salto en una de las rampas, el chico perdió el control del vehículo y su cuerpo cayó encima del manillar, clavándose en el estómago unos cinco centímetros del acero.

A pesar de la gravedad de la lesión, en ningún momento el herido perdió la consciencia y vio como los bomberos cortaban con una sierra el manillar y se lo llevaban en un helicóptero con el metal aún clavado hasta un hospital de Castelló.

El siniestro ocurrió alrededor de las 12.00 horas cuando I. B., natural de la localidad castellonense de Aín, estaba deslizándose con su "skatebike" -una mezcla entre patinete y bicicleta con un mango central a modo de manillar- por una de las múltiples rampas la pista de patinaje de Onda. En ese momento, en las instalaciones había una treintena de personas, la mayoría de ellas jóvenes y menores de edad.

Según testigos, tras superar una de las rampas a toda velocidad, el ciclista perdió el control de su vehículo, que cayó al suelo, y sobre él, los 80 kilos de su cuerpo. A diferencia de otras bicicletas más convencionales, las que se utilizan para el "skatebike" no suelen utilizar protección de plástico el manillar, ni siquiera el tope de los "manguitos". Tras la caída de la bici, el mango central quedó colocado hacia arriba.

Otros ciclistas y patinadores que se encontraban allí en ese momento dieron aviso al 112 y hasta el lugar de los hechos se trasladó la Policía Local, Guardia Civil y médicos de urgencias. En un principio, los médicos querían trasladar al herido con la bicicleta clavada, y que la desincrustaran en el hospital. Pero antes decidieron avisar a los bomberos del cuerpo Espadán-Mijares, quienes se ofrecieron a cortar el manillar con una sierra para que el traslado y la posterior intervención fueran menos aparatosos. La operación de los bomberos, con la asistencia de los médicos, duró alrededor de 45 minutos y una vez terminada, el herido fue trasladado en estado grave hasta el Hospital de la Plana, donde fue intervenido para extraerle el trozo de metal que seguía alojado en su estómago. Según las fuentes consultadas, se encuentra fuera de peligro.