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Agentes de la policía nacional lograron frustrar la semana pasada un intento de secuestro exprés en un domicilio de Paterna. Al parecer, los asaltantes, que llevaban armas de fuego, intentaron llevarse por la fuerza a un niño de nueve años, hijo del propietario de un bar de dicho municipio, para de esta forma extorsionar a su padre, a quien exigían una gran cantidad dinero.

La rápida intervención policial evitó que los presuntos secuestradores llevaran a cabo sus planes, al ser detenidos en el lugar de los hechos. Según ha podido saber este periódico, la policía ha arrestado a al menos cuatro personas por su presunta participación en este asalto violento, entre ellos una empleada del bar que regenta la víctima.

Fuentes conocedoras del caso apuntaron que la mujer detenida, que trabajaba como camarera en dicho bar de Paterna, era la encargada de facilitar la información necesaria para llevar a cabo el secuestro. Además, estas mismas fuentes apuntaron que se tiene la sospecha de que esta mujer, de nacionalidad colombiana, haya utilizado esta mismo método en anteriores puestos de trabajo.

Los hechos se produjeron el pasado 22 de mayo cuando el dueño de un bar de Paterna fue abordado por unos desconocidos a las puertas de su domicilio. Según explicaron conocedoras de lo ocurrido, los asaltantes le encañonaron con una pistola y le amenazaron con llevarse a su hijo, de nueve años, si no atendía a sus pretensiones.

Estas mismas fuentes apuntaron que los asaltantes querían llevarlo a una sucursal bancaria próxima, mientras otros se quedaban custodiando a su hijo, para que les entregara el dinero de su cuenta corriente.

Los arrestados, a prisión

Agentes de la policía nacional, que iban de paisano, y que se encontraban en las inmediaciones de la casa,procedieron inmediatamente a detener a los sospechosos, evitando así el secuestro del menor. Al parecer, la policía estaba ya tras la pista de los autores del asalto al tener bajo vigilancia a la empleada del local ahora detenida. Estas mismas fuentes explicaron que se da la coincidencia de que en varios lugares de trabajo donde había estado empleada esta mujer habían sufrido extorsiones similares.

La policía detuvo a entre cuatro y cinco personas, todas ellas de origen suramericano. Los arrestados pasaron a disposición judicial acusados de detención ilegal, extorsión. Se investiga también su vinculación en otros delitos, como robos con fuerza. Tras prestar declaración el juez decretó el ingreso en prisión de al menos cuatro de ellos.