La Policía francesa detuvo ayer en Marsella, en el sureste de Francia, a Giuseppe Falsone, considerado el jefe de la mafia siciliana en la provincia de Agrigento y cuyo nombre figuraba en la lista de los treinta prófugos más peligrosos de Italia.

El detenido, que se encuentra en una comisaría de Marsella, negó ser Falsone y, por ello, los agentes comprobarán sus huellas digitales para verificar su identidad. Según fuentes cercanas a la investigación, el ahora arrestado se sometió a varias operaciones de cirugía estética para modificar su rostro.

Sobre Falsone, de 39 años, pesaba una orden de búsqueda y captura desde 1999 por asociación mafiosa, homicidio y tráfico internacional de droga.

Los investigadores consideran que se trata de una figura muy cercana a Bernardo Provenzano, que sustituyó a Salvatore «Totó» Riina al frente de Cosa Nostra, la mafia siciliana, y que fue arrestado en 2006.

Provenzano asumió el control de Cosa Nostra en la década de los ochenta junto a Riina tras una cruenta guerra de clanes, un control que pasó a ser completo después de la detención de Riina en 1993 y que mantuvo durante más de una década.

Tras conocer la noticia del arresto, el ministro italiano de Justicia, Angelino Alfano, declaró: «Hoy es un día feliz para Italia, Sicilia y la provincia de Agrigento. Ha sido arrestado Giuseppe Falsone, uno de los jefes más despiadados de nuestra tierra».