Un "pachanga" entre unos amigos terminó el pasado jueves en tragedia. Un hombre de 52 años falleció en un complejo deportivo de San Antonio de Benagéber tras sufrir un infarto cuando jugaba un partido de fútbol 7, según confirmaron fuentes de las instalaciones deportivas y de la Policía Local del municipio del Camp de Túria.

Los hechos ocurrieron sobre las 21 horas del pasado jueves. Un grupo de personas habían alquilado uno de los campos de fútbol 7 en el complejo deportivo Crack's, donde cada semana se juegan cientos de partidos. A mitad del encuentro, el hombre se empezó a marear y cayó al suelo desplomado. Enseguida se avisó a emergencias, aunque según el jefe de Policía Local de San Antonio de Benagéber, Luis Trejo, dos hombres que decían ser dentistas intentaron reanimarlo realizándole los masajes cardíacos correspondientes, aunque nada pudieron hacer por la víctima según la misma fuente, que elogió la rápida actuación de estas personas.

Una unidad del Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU) llegó al campo de fútbol y realizó tareas de reanimación durante 30 minutos, aunque el hombre ya había fallecido. Algunos amigos de la víctima criticaron la tardanza del SAMU, pero según confirmó el jefe de la Policía Local, la ambulancia llegó en 16 minutos, un tiempo bastante rápido puesto que llegaba de Casinos, a unos 30 kilómetros.

Un responsable del centro deportivo confirmó que en las instalaciones no disponen de un desfibrilador, aunque comentó, que tampoco se les obliga por ley. "Ha sido una situación lamentable pero es imposible que en todos los complejos deportivos haya un médico, una ambulancia o un desfibrilador, que ha de ser utilizado por personal experto", manifestó.

Tras certificar su muerte, el cuerpo del hombre todavía permaneció en el campo de fútbol casi dos horas, hasta que el juez procedió al levantamiento del cadáver. La Guardia Civil de La Pobla de Vallbona es ahora quien lleva las diligencias del caso.

No es el primer caso de muertes mientras se practica deporte en la comarca del Camp de Túria. Hace tres meses un joven de Bugarra de 16 años murió súbitamente mientras practicaba karate en La Pobla de Vallbona.