El dueño de un club de la playa de San Juan de Alicante logró encerrar en un ascensor hasta la llegada de la policía a dos hombres que instantes antes le habían amenazado con un arma para cobrar un dinero que supuestamente adeudaba a una de sus empleadas.

Los hechos ocurrieron el pasado fin de semana, cuando los dos acusados irrumpieron en el local y uno de ellos amenazó con una pistola al propietario del establecimiento con la intención de cobrar la deuda que, al parecer, debía a una de sus trabajadoras, amiga de los delincuentes y que se encontraba también en el lugar, según fuentes policiales.

Ante la presencia de varios testigos que estaban en esos momentos en el club, los agresores huyeron y se introdujeron dentro de un ascensor. Sin embargo, el dueño del local se apresuró a cortar el suministro eléctrico, por lo que los delincuentes se quedaron encerrados en el ascensor hasta que llegó la Policía, tras lo cual alertó del suceso a la Policía Nacional.

La policía detuvo a los dos hombres y a la mujer, a los que intervino una pistola semiautomática 9 mm. También apresaron a un cuarto individuo, cómplice de los anteriores, que estaba en un vehículo de alta gama aparcado ante la puerta del inmueble y con el motor en marcha para facilitar la huida de los delincuentes. Los cuatro arrestados son todos de nacionalidad rumana.