?

La costa del mediterráneo español se ha convertido desde hace unos años en un paraíso para los prófugos italianos. La mafia napolitana ha encontrado en la Comunitat Valenciana, Cataluña y la Costa de Sol un enclave perfecto para coordinar sus actividades criminales lejos de las autoridades de su país. Así lo explica en su libro Mafia export el escritor y político Francesco Forgione.

Luigi Iannaco, arrestado en Valencia en 2005, y Pasquale Claudio L., Locatelli, detenido en Alicante en 2006, son sólo dos ejemplos de los capos de la mafia napolitana asentados en tierras valencianas.

Forgione, presidente la Comisión Parlamentaria Antimafia, ha elaborado un curioso atlas sobre cómo la Mafia en sus principales ramas -Cosa Nostra, N'Drangheta y Camorra- han colonizado el mundo y principalmente las ciudades españolas próximas al mar Mediterráneo.

Según detalla en este libro, presentado ayer en Barcelona, esta "cartografía" del crimen organizado italiano mueve anualmente entre 130.000 y 150.000 millones de euros anuales, de los que sólo entre un 30 y 40% proceden de la actividad "criminal convencional" como narcotráfico o prostitución.

El resto es dinero "lavado" procedente de negocios supuestamente legales, vinculados en muchos casos al sector inmobiliario, y que ahora está apostando por nuevos "negocios" como el tráfico de personas, con mano de obra barata procedente de países poco desarrollados.

España es uno de los destinos favoritos de los criminales italianos que huyen de la justicia de su país, y que viven aquí como si fueran empresarios, a veces propietarios de simples restaurantes, según explica Forgione.

Además de por su situación geopolítica que la convierte en puerta de entrada de la droga procedente de Sudamérica y África, España es atractiva para los mafiosos, según el escritor, por su legislación menos dura.

Cientos de mafiosos

Forgione cifra en cientos los mafiosos residentes en España, sobre todo en el mediterráneo (Cataluña, Costa del Sol, Valencia) y Madrid, incluidos los que están en las cárceles españolas, unos centros penitenciarios que favorecen que los capos sigan dirigiendo su organización, ya que pueden hacer llamadas o recibir muchas visitas. "En Italia, los mafiosos en prisión están aislados", aseguró.

El escritor italiano también apuntó la relación que existe entre la política y la mafia, y de ahí el poco interés por erradicarla.

"Mafia export" no es una novela negra, sino un trabajo de investigación documentado por las sentencias e investigaciones realizadas por la policía de varios ?países.