Un vecino de Cullera que había salido a correr por la playa del Marenyet se encontró a última hora de la tarde de ayer parte de un cadáver en descomposición que el mar acababa de expulsar a la orilla. En concreto, se trata de las piernas y parte de la columna vertebral de un varón que mantenía puestos unos pantalones vaqueros y al menos una zapatilla deportiva. A juzgar por el aspecto del cuerpo y el avanzado estado de putrefacción, el cadáver debía llevar mucho tiempo en el agua. De hecho, el pantalón estaba parcialmente cubierto por lapas de gran tamaño y otros moluscos que se habían ido adhiriendo a la tela durante el tiempo que ha permanecido en el agua.

Unos bañistas ya habían observado un bulto extraño flotando en el mar poco después de las 19.00 horas, a cierta distancia todavía de la orilla, aunque no fue hasta un par de horas más tarde, sobre las nueve de la noche, cuando un vecino alertó a la Policía Local de la presencia de estos restos humanos ya fuera del mar.

La Guardia Civil desplazó a agentes de Seguridad Ciudadana y del equipo de policía judicial del acuartelamiento de Cullera para hacerse cargo de la investigación. Los guardias permanecieron varias horas en la zona y, de hecho, ya caída la noche, continuaban inspeccionando la playa de l´Illa y recogiendo de la arena objetos en previsión de que puedan ser útiles para la investigación. Agentes del laboratorio de criminalística podrían sumarse hoy a la inspección ocular. En principio, la zona debía quedar acordonada anoche para continuar con el examen de la arena a primera hora de hoy, cuando la luz permita buscar con mayor precisión.

El primer objetivo que se presume complicado es la identificación del cadáver ya que no portaba documentación alguna. Los investigadores deberán analizar ahora todas las denuncias por desaparición presentadas en las últimas semanas no sólo en la Comunitat Valenciana, sino también en el resto de la costa mediterránea e, incluso, en las Baleares.

De hecho, las corrientes que llegan a las playas valencianas pueden traer objetos incluso desde el norte de África.

De momento, no hay hipótesis sobre las causas de la muerte, dado el avanzado estado de descomposición y las mutilaciones del cuerpo, cuya identificación dependerá, casi con toda seguridad, de una prueba de ADN. Será el examen forense al que sea sometido hoy el cadáver en el Instituto de Medicina Legal de Valencia, adonde fue trasladado ya de madrugada por orden del juez de guardia de Sueca, el que aporte algún dato más de las razones de la muerte y el desmembramiento, y si éste fue anterior al fallecimiento o producto de la acción de la fauna marina.