El joven de 20 años acusado de intentar matar a otro a navajazos en una discoteca de Alfafar el pasado mes de mayo se entregó voluntariamente a la Guardia Civil hace un par de semanas debido a la fuerte presión policial. No obstante, el presunto autor de la agresión se negó a reconocer los hechos y únicamente manifestó que acudía a las dependencias policiales al tener conocimiento, a través de su abogado, de que lo estaban buscando como principal sospechoso de la tentativa de homicidio. El acusado fue puesto a disposición judicial y el juez decretó su ingreso en prisión provisional.
Su víctima, un joven de 22 años vecino de Benifaió, continúa postrado en una silla de ruedas como consecuencia de las lesiones ocasionadas por el ahora detenido, quien le asestó ocho puñaladas, una de las cuales le afectó a la médula ósea. El agredido va regularmente a rehabilitación con la esperanza de recuperar la movilidad de la pierna derecha algún día, según explicó a Levante-EMV tras recibir el alta hospitalaria después de cuarenta días ingresado en el Hospital La Fe de Valencia.
El presunto agresor, conocido en Catarroja con el sobrenombre de «El Rabote», estaba siendo buscado por la Guardia Civil tras ser identificado como el autor material de las puñaladas. Al parecer, hace un par de semanas, al verse prácticamente acorralado por los investigadores y temiendo ser detenido, el joven, de 20 años, acudió acompañado por su abogado al cuartel de la Guardia Civil de Alfafar y se entregó de forma voluntaria.
El sospechoso fue detenido y puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número uno de Catarroja, quien decretó su ingreso en prisión provisional por un delito de tentativa de homicidio, según informaron fuentes jurídicas. El joven se negó a declarar y únicamente explicó que se había entregado porque le habían dicho que la Guardia Civil le estaba buscando. Sin embargo, todo apunta a que el acusado, con numerosos antecedentes, decidió entregarse después de dos meses para que así le apliquen una atenuante, según apuntaron las fuentes consultadas por este periódico.
El intento de homicidio por el que está acusado se produjo el pasado 5 de mayo por la mañana cuando el joven herido se encontraba de «botellón» con un amigo en el aparcamiento de una discoteca de Alfafar. El ahora arrestado se les acercó y les pidió bebida. Posteriormente regresó y «sin mediar palabra», según el testimonio de la víctima, le asestó hasta ocho cuchilladas con una navaja tipo mariposa. El herido, de 22 años, fue trasladado en estado grave al Hospital La Fe de Valencia, donde permaneció ingresado durante cuarenta días.
Ocho navajazos
Le atacó por la espalda en el aparcamiento de la discoteca
El 5 de mayo el acusado asestó presuntamente ocho puñaladas a su víctima «por la espalda y sin mediar palabra» cuando éste se encontraba de «botellón» en el aparcamiento de una discoteca de Alfafar.
