Un matrimonio ha sido procesado por la sección segunda de la Audiencia Provincial de Castelló después de que su hija de trece meses fuera ingresada en la UCI pediátrica por intoxicación de cannabis. Los hechos sucedieron en 2011 en el domicilio de la pareja que supuestamente administró la droga a la menor y acudió posteriormente a un hospital de Castelló con ella en estado de adormilamiento.

Tras el primer proceso, los padres del bebé presentaron un recurso de apelación y pidieron la nulidad del caso alegando que en modo alguno descuidaron a la menor y explicaron que lo que ocurrió fue un "lamentable accidente", producido por la "inquietud" propia de una menor. Por ello, entendían que la imputación mantenida era "absolutamente infundada".

El tribunal desestimó el recurso ya que consideró que no puede descartarse que la ingesta de cannabis por la menor "fuera provocada intencionadamente o por imprudencia punible".

Además, la Audiencia recordó que no se puede dejar de tener en cuenta que la menor apenas contaba con trece meses de edad en la fecha de los hechos, y que las explicaciones dadas por sus padres sobre la ingesta "distan de resultar convincentes".

Entre otras cosas, el tribunal indicó que sus declaraciones "ni siquiera fueron uniformes". Ya que mientras en la comisaría los inculpados aludieron a un accidente inexplicable como consecuencia de ser el padre consumidor de hachís, la madre le dijo a la trabajadora social que ellos no consumían drogas, y que el accidente habría podido tener lugar en la tarde previa al ingreso hospitalario en que la niña habría estado en compañía de una tía.

Como consecuencia, la Audiencia indicó que "no sabríamos decir si resulta más verosímil la hipótesis de la imprudencia o la de la administración dolosa de la droga a la menor, buscando, quizá, que la niña permaneciera sumida en un estado de adormilamiento aunque no tan intenso o prolongado como el que la droga le causó, y que fue lo que alarmó a sus progenitores".