Una joven gandiense de 19 años embarazada de cinco meses tuvo la desgracia de cruzarse la noche del pasado miércoles con un hombre de 40 años que, incomprensiblemente, no tuvo reparo en propinarle varias patadas en la barriga pese a su evidente estado de gestación. Los hechos ocurrieron sobre las diez y media junto al parque de Sant Pere de Gandia. La joven caminaba por el lugar cuando el agresor se cruzó con ella y le hizo insinuaciones de carácter sexual. La víctima, que no lo conocía en absoluto, optó por seguir su marcha en un intento de eludir al extraño, lo que, según señalaron testigos, fue interpretado por el agresor como un desplante.

Así, su reacción fue sacar una navaja de grandes dimensiones y tratar de clavársela a la mujer, algo que ella impidió sujetándole la mano. En ese forcejeo recibió varias patadas en el vientre a pesar de que algunas personas que estaban en el lugar trataron de impedir el violento ataque.

Según informó ayer la Jefatura de la Policía Nacional, varios amigos que iban con ella avisaron a una patrulla, que acudió inmediatamente. Lo primero que hicieron los agentes fue atender a la mujer, a la que trasladaron al hospital Francesc de Borja, muy cerca de donde se produjo la agresión. Allí los médicos le diagnosticaron contusión abdominal, pero afortunadamente no hay riesgo para el desarrollo del feto.

El presunto agresor, de nacionalidad marroquí, fue detenido, tras lo cual los policías averiguaron que tiene en vigor una orden de expulsión de España desde hace diez años y que en su ficha constan numerosos antecedentes policiales. Pese a ello, el juez decretó ayer libertad con cargos bajo la acusación de amenazas graves y agresión para el acusado.