Cinco acusados aceptaron ayer sendas penas de tres meses de prisión por falsificar y distribuir artículos de lujo en Valencia. Los imputados confeccionaban bolsos de Louis Vuitton en talleres de Valencia. Los imputados se han beneficiado de una rebaja de la condena por el retraso acumulado en el procedimiento, iniciado hace más de ocho años.

Las pesquisas las empezaron agentes del puesto de la Guardia Civil de Sueca que recibieron la confidencia de que en un inmueble de Riola había un importante movimiento de personas de origen norteafricano que salían portando bolsas de plástico de grandes dimensiones. La Guardia Civil detuvo a uno de los condenados y le intervino treinta bolsos, una cartera y un monedero de la marca Carolina Herrera que eran imitaciones.

La Guardia Civil registró el inmueble de Riola y se incautó de gran cantidad de ropa y complementos falsificados. Los agentes comprobaron que el grupo también distribuía los productos desde unas naves de Aldaia. Los investigadores descubrieron en ese momento que los productos se falsificaban en talleres de Valencia. Los guardias civiles encontraron en uno de los talleres de Valencia maquinaria para la fabricación de bolsos, monederos y cinturones.

Los cinco acusados, que reconocieron los hechos durante el juicio celebrado ayer, han sido condenados por un delito contra la propiedad industrial.