El consejero delegado de la empresa valenciana de promoción inmobiliaria que hace unos años intentó poner en marcha dos ambiciosos, a la vez que insólitos, proyectos en la ciudad de Valencia, como son una isla artificial frente a la Malva-rosa y un teleférico de trece kilómetros de largo, se encuentra imputado por un delito de estafa, según ha podido saber Levante-EMV. En esta ocasión no se trata de ningún megaproyecto empresarial sino del arrendamiento de un loft en una urbanización de Montroi, vivienda sobre la cual pesa un proceso de ejecución hipotecaria. El actual inquilino de la misma, que pagó dos años de alquiler por adelantado, descubrió hace unos meses que el citado inmueble era propiedad del banco, cuando la comisión judicial le notificó que iban a proceder a su lanzamiento.

El supuesto estafado arrendó la vivienda, situada en la urbanización de El Balcón de Montroi, el 6 de noviembre de 2012, tras abonar por adelantado un total de 10.400 euros a la empresa inmobiliaria que dirige el promotor valenciano. La víctima de este supuesto engaño, que ha denunciado al empresario por estafa, asegura que vio el anuncio de alquiler en internet y que tras visitar varios lofts, tanto en Montroi como en Turís, aceptó el trato, sin poner reparos al pago de dos años de renta por adelantado. "A mi también me venía bien, por mi trabajo, no estar preocupándome de pagar cada mes y él me dijo que necesitaba liquidez para montar una empresa de viajes", apuntó el estafado, quien también sostiene que se fió de él por la supuesta reputación que tenía dentro del mundillo empresarial de Valencia.

Sin embargo, unos dos meses después de estar residiendo en el citado inmueble, "unos policías locales vinieron a la casa y me dijeron que estaba embargada", asegura el denunciante.

Cuando se puso en contacto con el responsable de la promotora, el ahora imputado, éste le aseguró que desconocía por completo que la vivienda estuviera en fase de ejecución hipotecaria y que no se preocupara por nada. "Luego supe que nueve meses antes del arrendamiento ya sabían que se la iba a quedar el banco", afirma el supuesto estafado, que podría quedarse en la calle en breve.

"A mí lo que me sabe mal es que haya actuado de mala fe", asegura la víctima, quien ha presentado una querella por un delito de estafa contra esta persona. En ella se insiste en que el empresario arrendó la vivienda "siendo conocedor de la existencia del procedimiento de ejecución hipotecaria". Asimismo existe la posibilidad de que haya más afectados, según apuntaron fuentes jurídicas.

Este periódico trató de ponerse ayer en contacto con el empresario, pero la única respuesta fue la de su contestador de voz: "Estamos navegando o fuera de cobertura". Un juzgado de instrucción de Picassent ha abierto diligencias previas por un delito de estafa.

El funicular más largo en la ciudad más llana

El promotor imputado por estafa sorprendió a todos en 2007 cuando presentó el proyecto de levantar una isla artificial, al estilo de la de Dubai, frente a la playa de la Malva-rosa para convertirla en un icono turístico de Valencia. Isla Luna, nombre con el que se dio a conocer la idea, quedó en eso, en un utópico proyecto que se pasaba la Ley de Costas por el mismísimo Arco del Triunfo. No contento con ello, año y medio después este mismo empresario presentó otro arriesgado proyecto, la construcción de un teleférico que atravesara la ciudad de Valencia desde el puerto hasta el Parque de Cabecera. El funicular, que pretendía ser el más largo del mundo con una longitud de 13 kilómetros, requería una inversión inicial de 20 millones de euros. Con lo que no contó el emprendedor valenciano es que la capital del Túria es una de las ciudades españolas más llanas de la península.