Un hombre de 48 años asesinó ayer a tiros en el pueblo de Daburiya, en el norte de Israel, a su exmujer, a dos de sus hijas y a otro varón adulto e hirió a otra de sus hijas, antes de suicidarse. Los agentes investigan el móvil del suceso, que comenzó cuando el hombre entró en la residencia de ancianos donde trabajaba su ex esposa, de 37 años.

Allí abrió fuego contra ella y contra una de sus hijas, de cuatro años, que falleció por los disparos. Luego fue a otro punto de la localidad para disparar contra su hija de 16 años, que murió, y la de 15 años, que se encontraba ayer hospitalizada en estado grave.

No paró ahí su brutalidad, puesto que desde allí se desplazó a un edificio residencial para matar a un hombre de 55 años que trabajaba en la misma residencia de ancianos que su ex esposa.

La Policía halló poco después el cuerpo sin vida del presunto autor, quien aparentemente condujo hasta un valle a la salida de Daburiya, localidad árabe situada cerca de la ciudad de Nazaret, y se suicidó con el mismo arma empleada en los asesinatos.