La Policía Local de Cheste se ha incautado durante la campaña veraniega de más de 6.500 kilos de algarrobas de dudosa procedencia. Pese a que la producción de este producto ha sido muy inferior a la de años anteriores, la intervención de tan importante cantidad responde a una novedosa fórmula que ha puesto en marcha este año la Jefatura de la Policía Local. Dicho modelo para prevenir los robos en los campos consiste en hacer un seguimiento a todas las personas que donaban o cedían la producción de sus cosechas a través de una instancia en la que se reflejaba la persona autorizada, el dueño del campo, la ubicación exacta del mismo y la fecha en la que se iba a recoger el producto. Durante un plazo de 48 horas se autorizaba a recolectar ese fruto. Obligatoriamente pasado ese periodo la persona debía de volver a solicitar una nueva autorización, que tenía que ser sellada. Se han elaborado más de una treintena de autorizaciones de este tipo.