La Guardia Civil ha detenido en Benidorm a un taxista por la violación de una turista cometida hace cinco años. El ADN ha sido la prueba que ha servido a los agentes para esclarecer el caso tras una laboriosa investigación en la que se llegaron a tomar muestras para obtener el perfil genético a medio centenar de conductores. Según confirmaron a este diario fuentes del Tribunal Superior de Justicia, un juzgado de la Vila Joiosa ha decretado el ingreso en prisión comunicada y sin fianza para el sospechoso por un presunto delito de agresión sexual.

Los hechos ocurrieron en agosto de 2008 cuando la víctima fue recogida por un taxi de madrugada mientras regresaba de una noche de fiesta por los locales de la calle Mallorca de Benidorm. Según denunció ésta en su día, el taxi la llevó hasta un paraje solitario de La Cala de Finestrat donde el conductor la violó.

El proceso para dar con el sospechoso ha sido arduo y en ocasiones ha llevado a callejones sin salida. Listados de todos los conductores que estuvieron de servicio esa noche, revisión de las cámaras de seguridad y de tráfico en las zonas donde ocurrieron los hechos y la colaboración de Radiotaxi y el Ayuntamiento de Benidorm.

La pista determinante vino cuando en la ropa interior de la víctima se encontraron restos de ADN del presunto agresor. Los agentes de la Guardia Civil tomaron muestras a los cerca de medio centenar de taxistas que habían estado de servicio esa noche. Los resultados de aquellas pruebas llegaron el pasado julio, momento en el que los agentes arrestaron al sospechoso y le pusieron a disposición judicial, quien no contaba con antecedentes por delitos de naturaleza sexual. El juzgado de Vila Joiosa decretó el encarcelamiento del sospechoso.

Las fuentes consultadas por este diario señalaron que la víctima, que ya había regresado a su país, ha vuelto expresamente para participar en una rueda de reconocimiento. En ella, identificó sin ningún género de duda al detenido como la persona que la violó hace cinco años.