La sección primera de la Audiencia Provincial de Valencia obliga a la juez que instruyó el asesinato de María Luisa Reig Nolasco en su vivienda de Albalat dels Tarongers en junio de 2011 a reabrir la causa para investigar una agresión anterior a la víctima po parte de su exnovio, detenido por su asesinato, a raíz de la cual la víctima estuvo nueve días en coma. Pese a la gravedad de esa agresión, la juez de Sagunt no había estimado oportuno incorporar a la causa del asesinato las diligencias que en su día practicó la Guardia Civil por la agresión machista, aunque la Audiencia corrige ahora esa circunstancia.

El Juzgado de Instrucción número 1 de Sagunt rechazó, primero en enero y luego, tras un recurso de reforma, en marzo pasados, la petición de las hijas de la víctima de que se investigase esa agresión anterior y que se tuviese en cuenta como antecedente a la hora de valorar el asesinato, dado que en ambos casos la víctima y el presunto autor eran los mismos: María Luisa y el que fue su compañero sentimental durante años, Antonio G.V., alias Toni Caracortada.

Tras rechazar el recurso, el abogado de los hijos y los hermanos de María Luisa, el letrado Miguel Ferrer, apeló de nuevo, pero esta vez ante la Audiencia de Valencia. El pasado 16 de octubre, la sección primera no sólo decidió estimar la petición de la familia de María Luisa de proseguir con la investigación del asesinato, sino que la magistrada que redacta el auto afirma que "la Sala comparte el criterio del apelante", en referencia a las hijas de la víctima, y estima que "ante la gravedad de los hechos investigados puede ser indicio relevante la existencia de un antecedente de agresión homicida por parte de uno de los imputados en el presente procedimiento sobre la fallecida, teniendo en cuenta que la agresión consistió en golpear la cabeza de la víctima contra una piedra en repetidas ocasiones produciendo graves lesiones, lo que refleja la personalidad del agresor capaz de realizar semejantes actos".

Tal como ha venido publicando en exclusiva Levante-EMV desde el inicio del caso, María Luisa Reig Nolasco fue asesinada en torno a la una de la madrugada del 1 de junio de 2011 en su chalé de la urbanización Corral Blanco, en Albalat dels Tarongers, cuando llegaba de casa de su hermana, en el Port de Sagunt, adonde había ido a cenar con ésta y una amiga.

Apenas mes y medio más tarde, el grupo de Homicidios de la Guardia Civil detenía al exnovio de la víctima, Antonio G.V., y al hijo mayor de aquélla, Pedro M.R., como supuesto autores de la muerte de María Luisa, a quien a continuación descuartizaron y quemaron, según prueba el único resto de la fallecida hallado hasta ahora: un fragmento óseo -parte del omóplato y de la base del cráneo- completamente calcinado, hallado precisamente en la única estancia de la vivienda que ardió.