Un joven de 22 años, natural de Valencia, ha sido condenado en Malta a cumplir once años en prisión por un delito de tráfico de drogas después de ser detenido intentando introducir un kilo de heroína en el país. Justo Ernesto B. B. fue arrestado en 2010 en el aeropuerto internacional maltés con dicha sustancia estupefaciente oculta en sus zapatos. El acusado reconoció los hechos durante el juicio y se declaró culpable para reducir la pena, que finalmente será de once años de cárcel y 23.000 euros de multa.

El ahora condenado contó con un cómplice, llamado Daniel, para introducir la droga en Malta. De hecho, según su testimonio, esta persona le debía pagar 3.000 euros por llevar la heroína hasta el país insular vía Holanda. Los hechos se remontan a 2010 cuando el joven, que ahora tiene 22 años, tomó un vuelo de Valencia a Amsterdam. Allí debía de recoger un paquete con 200 euros y un teléfono con tarjeta SIM.

Asimismo, en la estación de tren de la ciudad holandesa el acusado debía buscar en una papelera un par de zapatos, uno de los cuales contenía la droga. En ese momento, según ha quedado probado en la sentencia, el valenciano destruyó la tarjeta SIM española y compró una con conexión holandesa. Según lo establecido, cuando llegara a Malta debía tomar un taxi a un hotel en Birzebbugia y ponerse en contacto con Daniel para recibir más instrucciones.

No obstante, el joven fue arrestado en el aeropuerto internacional de Malta por funcionarios de aduanas, quienes encontraron la droga tras hacer un agujero en uno de sus zapatos. Las pruebas confirmaron que se trataba de heroína con una pureza del 26,7 por ciento. El juez le ha condenado a once años de cárcel y a pagar una multa de 23.000 euros.