Dos hombres aceptaron ayer sendas condenas de seis años y un día de prisión por intentar sacar del puerto de Valencia un cargamento de 110 kilos de hachís. Los dos acusados accedieron a la zona de carga con una furgoneta camuflada de una empresa de suministro de buques. Los traficantes que importaron la droga no han sido identificados.

Los hechos ocurrieron sobre las 23.50 horas del 5 de octubre de 2012. El servicio de seguridad de la terminal del puerto de Valencia alertó a la guardia civil de que había detectado una furgoneta parada que había realizado una maniobra sospechosa. Los agentes identificaron a los dos ocupantes de la furgoneta, que no dieron respuestas convincentes. Los guardias civiles inspeccionaron la furgoneta y encontraron un doble fondo en el que había ocultos tres fardos con 110 kilos de cocaína con una pureza del 72%.

Los procesados llevaban placas de matrícula falsificadas. La droga procedía del puerto ecuatoriano de Guayaquil. La Guardia Civil comprobó que los dos procesados recibieron indicaciones a través de dos teléfonos móviles, que les fueron facilitados por los traficantes que organizaron la operación. Los procesados extrajeron la droga de un contenedor tras romper el precinto de seguridad. La empresa del contenedor desconocía que llevara oculta droga.

El fiscal del caso pedía inicialmente que los dos procesados fueran condenados a 11 años, aunque ayer aceptó la rebaja de la pena.