El director de la Policía Nacional, Ignacio Cosidó, ha anunciado este jueves la detención de tres hombres pertenecientes a una red de prostitución que tenía secuestrados, sedados y en "muy malas condiciones de higiene" a dos niños de origen nigeriano para coaccionar a sus madres a ejercer la prostitución.

Junto con la detención de los tres hombres, la operación ha llevado a la liberación de cinco mujeres a las que la red obligaba a prostituirse y ha localizado a las madres de los dos menores, que se encontraban en Francia, también sometidas al control de la organización mediante amenazas, y a las que se les exigía entre 40.000 y 45.000 euros para liberar a sus hijos.

"Es un ejemplo de crueldad y brutalidad. La falta de escrúpulos de esta mafia las tenía completamente sometidas", ha explicado Cosidó, que ha felicitado a los operativos del cuerpo por las detenciones y la liberación de las mujeres esclavizadas y ha agradecido también la colaboración de la ONG que han colaborado en la operación.

El director de la Policía ha explicado que las detenciones se han producido como resultado de una investigación iniciada a principios de este año tras la localización de una mujer merodeando sola por las zonas tradicionales de prostitución de Vigo, de origen subsahariano y que carecía de documentos de identidad.

Tras varios días de cuidados por parte de una organización, la mujer fue "reponiéndose" y explicó que había logrado llegar a España en patera, con la ayuda de una organización y que había sido localizada por miembros de la misma cuando estaba en un de los centros de recepción de inmigrantes, desde donde fue recogida para ser obligada a prostituirse.

Tras meses de investigación, la policía ha detectado que, además de las cinco mujeres liberadas a las que la red obligaba a prostituirse, la misma organización "vendía como mercancía" mujeres de origen subsahariano a otras redes de proxenetas.

El inspector jefe del Centro de Inteligencia y Análisis de Riesgo (CIAR) de la Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF), José Nieto Barroso, ha indicado que los dos niños rescatados del secuestro llevaban entre cuatro y cinco meses secuestrados en habitaciones separadas de un domicilio de la localidad toledana de Valmojado y que se encontraban en "no muy buen estado de salud".

Los agentes de la operación de rescate, en la que han participado el Grupo II de la Brigada Central de Trata de Seres Humanos de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras y las UCRIF de Toledo y Vigo, han explicado que "cuando pudieron acceder a las habitaciones donde se encontraban los niños, hallaron las puertas bloqueadas con colchones y muebles y apreciaron un comportamiento totalmente anómalo en los niños".

Así, ha indicado que los responsables de custodiarlos los tenían "en muy malas condiciones de higiene" y en un "evidente estado de desnutrición", atados a las camas y ha señalado que probablemente les habían administrado sedantes o tranquilizantes "para que no dieran guerra". De hecho, los vecinos de la zona no sabían siquiera de su existencia, según ha explicado.

Por último, los responsables de la Policía han recordado que, para informar de estas situaciones, el cuerpo dispone de un número de teléfono gratuito atendido por policías especializados las 24 horas del día (900105090) y una dirección de correo electrónico (trata@policia.es).