La Guardia Civil detuvo a dos vecinos de Valencia por un presunto delito de extorsión al propietario de un taller en La Muela, Zaragoza. Los dos hombres, padre e hijo, de nacionalidad portuguesa, entraron en un taller de La Muela diciendo ser afiladores y el dueño les entregó unas herramientas para su afilado. Según fuentes de la Guardia Civil, al día siguiente, volvieron al local y pidieron 570 euros por el trabajo.

Le dijeron al dueño del taller que si no accedía harían uso de lo que portaban en el vehículo, supuestamente un arma. Como no tenía el dinero, fue conducido en un vehículo hasta un cajero, donde lo extrajo y entregó a los supuestos afiladores, que huyeron de La Muela.

El hombre denunció la extorsión y los agentes montaron un dispositivo, cuyo resultado fue la localización de las dos personas en un centro comercial en Utebo. El padre, J. M. B. G., tiene antecedentes policiales por hechos similares cometidos en varios puntos de España.