La lista de mujeres muertas a manos de sus parejas o exparejas volvió a incrementarse ayer con dos nuevos casos de violencia machista ocurridos en Madrid y Mungia (Vizcaya) en un intervalo de apenas unas horas. Con ellas, son las 15 las fallecidas este año. La primera en caer fue la española de 49 años María José S.C., hallada muerta con diversas puñaladas en el barrio madrileño de Fuencarral, en el domicilio de su expareja, José Manuel G.C., de 50 años, que ha sido detenido.

Fue en torno a la seis de la mañana cuando la Policía fue alertada. Al parecer, la víctima, que ya no vivía con José Manuel, acudió a casa de éste porque el asesino la engañó diciéndole que si no iba, se suicidaría. En un momento de la madrugada la actual pareja de María José recibió un mensaje desde el móvil de ésta, dándole a entender que le iba a dejar, lo que hizo sospechar a este hombre que algo iba mal y que la mujer podría estar retenida contra su voluntad, de modo que avisó de inmediato a la hermana de la víctima. Ésta alertó a la Policía Nacional, que acudió al domicilio y ya la encontró muerta, con el agresor a su lado. El hombre, a quien al parecer iban a desahuciar, fue detenido de inmediato.

Horas más tarde, Andina Reges Pereira de Brito, una mujer brasileña de 35 años, fue encontrada muerta en su domicilio de Mungia (Vizcaya) con signos de haber sido estrangulada por su exnovio. Poco después del crimen, la Ertzaintza arrestó al hombre, con el que la mujer acababa de romper una relación sentimental, motivo por el que se había mudado al piso donde fue atacada.

La mujer fue hallada inconsciente en la vivienda por su hija de 10 años cuando ésta regresó del colegio a comer, hacia las 13.15 horas. La pequeña dio la voz de alarma a los servicios de emergencias para pedir ayuda, pero la mujer no pudo remontar la situación y falleció. La víctima había contado a sus amigas que «tenía mucho miedo» y que su expareja «la vigilaba constantemente y le prohibía hablar con cualquiera».