Cerco a la economía sumergida. La Policía Autonómica ha desmantelado 44 talleres clandestinos de calzado y textil en la provincia de Alicante y ha procedido a la detención de 26 personas, dentro de la operación «Ecosub» que viene desarrollando en los últimos meses.
Las últimas actuaciones se efectuaron la pasada semana, con dos inspecciones en sendos negocios ilegales de Elx y Monòver que se saldaron con tres empresarios arrestados y 10 personas que estaban trabajando sin contrato, algunas de ellas en condiciones infrahumanas.
La directora general de Seguridad y Protección Ciudadana, Sonia Vega, informó ayer que la Policía de la Generalitat ha detectado en Alicante hasta 28 talleres ilegales de calzado, seis de confección de ropa, una de tinte de pieles, uno de cortado de pieles, dos reciclaje de ropa usada y uno de bordado de ropa, entre otros.
En cuanto a las últimas intervenciones realizadas la pasada semana, Vega detalló que «los policías detuvieron a tres empresarios tras la inspección y descubrimiento de dos talleres clandestinos de fabricación y aparado de calzado en Elx y Monòver, ubicados en sendas naves de polígonos industriales».
En este sentido, detalló que la intervención se inició semanas atrás, «fruto de las informaciones recibidas y posteriores comprobaciones e investigaciones realizadas por los policías de la sede de Elx. En una de las fábricas, concretamente en la de Elx, se encontraban empleados 13 trabajadores, ocho de los cuales carecían de contrato y de afiliación a la Seguridad social, por lo que procedieron a la detención del empresario».
Obligado a dormir en la fábrica
En cuanto a la fábrica de Monóvar, allí se encontraban trabajando en el momento de la inspección 18 empleados y, aunque dos estaban sin contrato, uno de ellos se encontraba en situación irregular en España y estaba obligado por los responsables de la fábrica a vivir en condiciones infrahumanas en el interior de la nave, por lo que se procedió a la detención de dos responsables de la empresa.
Tras las inspecciones realizadas, junto con funcionarios de Inspección de Trabajo con sede en Alicante, se pudo localizar a un total de diez trabajadores sin tener suscrito ni firmado contrato laboral alguno. Además, los agentes comprobaron que los trabajadores utilizaban productos químico, como colas y disolventes, «sin las más mínimas medidas higiénico-sanitarias y, además, se carecía de medios reglamentarios para la ventilación y expulsión de gases».
Los policías de la Generalitat tomaron declaración a los trabajadores y levantaron actas-boletines de denuncia por carecer de licencia para ejercer dicha actividad, seguro obligatorio, medidas de emergencia y tenencia y manipulación de productos químicos sin medidas de seguridad. de todo ello se ha dado cuenta a la autoridad Judicial de Elx y de Elda, respectivamente.
