La Policía Nacional ha detenido en Paterna, por un delito de hurto, al empleado de un almacén acusado de apoderarse de 23 teléfonos móviles y una tableta mientras embalaba la mercancía. El material sustraído por el arrestado, de 27 años y natural de Rumania, asciende a alrededor de 4.700 euros, según informaron fuentes policiales.

El representante la empresa, dedicada al almacén, venta y distribución de diferentes objetos, se había percatado de la desaparición de varios teléfonos móviles y tabletas del almacén. Además, en julio, la empresa comenzó a recibir por parte de los clientes quejas de que los pedidos no llegaban completos, y en tres ocasiones las cajas remitidas llegaron vacías a su destino.

En el marco de la investigación, los agentes averiguaron que un trabajador de la empresa sacó del almacén un pedido de cajas con 23 unidades de teléfonos móviles, revisó el contenido del envío y lo pasó a otro trabajador para que lo embalase. Al día siguiente, el cliente comunicó a la empresa que había recibido el paquete perfectamente embalado pero que faltaba un teléfono móvil. El empleado sospechoso aprovechaba el momento en que se quedaba solo para embalar los pedidos para apoderarse de su botín.