La Guardia Civil no descarta que el móvil fuera distinto al robo, hipótesis que al principio también se descartó, ya que aparentemente no faltaba nada en la vivienda. Que los homicidas se llevaran un televisor y que intentaran reventar una caja fuerte que no contenía dinero, sino sólo documentos, no encaja con el macabro desenlace. Dispararon a quemarropa a sus dos víctimas. El hombre, que de joven participó representando a Gran Bretaña en la modalidad de salto de trampolín en las Olimpiadas de Melbourne de 1956, recibió un disparo en la nuca, mientras que la mujer murió de un tiro en la cara. Sus cadáveres fueron hallados abrazados en un sofá de su vivienda de Xaló. Sus asesinos les dispararon con una pistola de balas del calibre 7,56, que no se ha encontrado.

Los vecinos de este tranquilo municipio viven horas de inquietud. El matrimonio era muy conocido y estaba integrado. «Que no sepamos por qué los han matado todavía nos provoca más miedo», dijo ayer una amiga íntima de Jean. El alcalde, Joan Miquel Garcés, subrayó que el municipio es muy tranquilo y coincidió en que este doble crimen «es muy extraño».