La Policía Nacional ha desarticulado una trama de fraude piramidal fundada por un valenciano de 41 años, quien creó una ciberdivisa llamada «unete» con la cual habría estafado presuntamente más de 50 millones de euros en una veintena de países. La cifra de afectados asciende a unas 50.000 personas, 6.000 de ellas en España, que eran captadas a través de actos publicitarios con eventos en hoteles de lujo, vídeos promocionales o charlas formativas, en las que se ofrecía a los inversores un rápido ingreso extra insertando simplemente anuncios de la compañía en la red. Posteriormente el dinero invertido era convertido por la empresa estafadora en la moneda virtual creada por el valenciano, que realmente carecía de valor alguno.

«Somos una empresa joven y dinámica y a todas las grandes compañías en sus principios les ha ocurrido como a nosotros, que tenemos las cuentas bloqueadas y un hacker que desde dentro quiere destruir el sistema», se justificaba José Manuel Ramírez, el fundador valenciano de este «bitcoin español» en un vídeo promocional colgado en la red hace apenas unos meses para relanzar su proyecto «Unetenet». «Tenemos un sistema económico independiente, en el que todo queda en mano de los usuarios y con una pasarela de pagos para no tener problemas. Somos la empresa con mayor capacidad para generar 'unetes' -moneda virtual que él mismo creó-», sostiene para seguir captando víctimas pese a las numerosas denuncias ya presentadas en ese momento.

Las investigaciones comenzaron hace año y medio tras una primera denuncia de un antiguo trabajador de la empresa presentada en Bolivia. Expertos de la policía nacional en fraude financiero y blanqueo de capitales empezaron a analizar las diferentes denuncias interpuestas en distintos puntos de España. En la provincia de Valencia se tiene constancia de cuatro denuncias, aunque se sospecha que el número de afectados en la Comunitat es mucho mayor. De hecho, el único implicado arrestado hasta el momento en Valencia, colaborador de la organización y que se dedicaba a captar inversores, confesó a los agentes haber conseguido un gran número de usuarios nuevos, por lo que se espera que afectados que todavía no habían denunciado lo hagan ahora tras destaparse el fraude.

En total han sido detenidas 20 personas; ocho de ellos en la provincia de Sevilla, a cuatro en Arrecife (Lanzarote), a dos en Madrid, a otras tantas en la provincia de Málaga, a otras dos en la de Alicante y otra en Langreo (Asturias), a los que se sumaría el arrestado en Valencia. En los cinco registros realizados se han intervenido equipos informáticos, discos duros, numerosa documentación relacionada con estafas y blanqueo de capitales, 15.505 euros y dos vehículos de alta gama. Además, se ha bloqueado una cuenta en Letonia con más de cinco millones de euros, casi 22 millones de dólares americanos, 2.600 dólares canadienses, 1.600 libras esterlinas y 365 dólares australianos, procedente todo ello de la estafa investigada.

Dinero rápido con trampa

Los fundadores de esta organización, entre los que están el valenciano y su compañera sentimental, crearon una amplia red de clientes con el objetivo de atraer a personas que buscasen algún tipo de ingreso extra en el menor tiempo posible por el simple hecho de insertar una serie de anuncios de la compañía en la red. Para ello la empresa ofrecía la compra de paquetes y las ganancias conseguidas irían en proporción directa al paquete contratado, con una alta rentabilidad. Fuentes policiales explicaron que con una inversión de 18.000 dólares americanos se podía llegar a conseguir unos beneficios anuales de 67.600, en pagas semanales de 1.300 dólares. El problema surgió cuando la compañía convirtió todo el dinero acumulado por los inversores en sus respectivos «back-office» en «unetes» sin valor real alguno.