Agentes de la Guardia Civil de Tráfico detuvieron ayer de madrugada a cuatro conductores, de nacionalidad francesa y origen magrebí, que protagonizaron una espectacular persecución por la AP-7, desde Sagunt hasta Favara, tras romper las barreras de hasta dos peajes y alcanzar velocidades próximas a los 250 kilómetros por hora. Los arrestados circulaban en tres deportivos de la marca Mercedes y un todoterreno Opel junto a sus supuestos familiares, entre ellos mujeres y niños menores de edad. Al parecer, y a falta de que prosigan las investigaciones, los sospechosos se trasladaban desde Francia a Marruecos para vender varios de estos coches de alta gama, alguno de los cuales tenía el número de bastidor modificado, en el mercado negro.
Los cuatro vehículos implicados en esta persecución se dieron a la fuga en el peaje de Sagunt al percatarse de la presencia de un vehículo de la Guardia Civil de Tráfico. Curiosamente el coche policial estaba atendiendo un servicio por un accidente pero los sospechosos pensaron que se trataba de un control y arremetieron contra la barrera del peaje saltándose el mismo y comenzando así su temeraria huida con niños a bordo de varios de los coches.
La Guardia Civil dio parte al resto de unidades de Tráfico de Valencia, Alzira y Gandia para que establecieran controles en las salidas de la AP-7 y así parar a estos cuatro vehículos con matrícula francesa. No obstante, a la altura del peaje de Silla los sospechosos volvieron a saltarse la barrera y mientras uno de los coches era parado por la Guardia Civil de Tráfico, los otros tres lograban esquivar dicho control y seguían su marcha a gran velocidad.
Los vehículos de la Guardia Civil no podían alcanzarlos dadas la velocidades a las que llegaron a circular los deportivos, modelo Mercedes AMG V8 de 6.200 cc. De hecho alguno de los radares situados en la AP-7 llegó a saltar por una velocidad próxima a los 250 kilómetros por hora, según apuntaron las fuentes consultadas por este periódico.
Finalmente a la altura de la salida de Favara-Cullera una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico del Destacamento de Gandia, que se había sumado al operativo para cortarles el paso, logró parar y detener a los sospechosos. En los coches viajaban además de los detenidos las supuestas mujeres e hijos de éstos, para posiblemente no levantar sospechas al cruzar la frontera.
De hecho, se investida si los cuatro conductores arrestados viajaban desde Francia a Marruecos con su familia para una vez allí vender los tres vehículos de alta gama en el mercado negro. El grupo de Atestados de la Guardia Civil detectó que al menos uno de los coches tenía el número de bastidor modificado y que los sospechosos portaban una cantidad importante de dinero en metálico encima.
A la espera de que prosigan las investigaciones los cuatro arrestados permanecen en los calabozos de la Guardia Civil de Almussafes acusados de varios delitos contra la seguridad vial por conducción temeraria y atentado a agente de la autoridad. Asimismo los cuatro vehículos quedaron inmovilizados y se investiga ahora su procedencia por si alguno de ellos fuera robado.
