Los socorristas de la Cruz Roja sacaron ayer del mar en la playa de l´Arenal de Xàbia a un anciano de 85 años que se estaba ahogando. Tenía las constantes vitales descompensadas y respiraba con mucha dificultad. Su estado era crítico. También auxiliaron en el Portitxol a dos niñas y a su padre. La corriente los arrastraba mar adentro y ya estaban a 50 metros de la orilla.

El mes de agosto ha comenzado en Xàbia con trabajo a destajo para los socorristas y la policía local. Los rescates son el pan nuestro de cada día. Desde el viernes, han socorrido a 17 bañistas en apuros e incluso heridos. Siete de ellos son menores. El resto, excepto el padre de ayer, superan los 60 años de edad. Los niños y los mayores están más a merced de las corrientes.

El sábado, cuando en las playas ondeaba la bandera roja por el temporal, los socorristas sacaron del mar a ocho bañistas, cuatro de ellos niños. No bastó con balizar los tramos de la playa de l´Arenal donde se forman remolinos ni avisar por megafonía de la prohibición de bañarse. Los turistas estaban ávidos de mar.

Los socorristas salvaron el domingo a una mujer mayor que se había metido en un tramo balizado de fuertes corrientes. También inmovilizaron y trasladaron al hospital a una niña de nueve años que sufrió un traumatismo cervical y otro lumbar. Una ola la atrapó y la golpeó contra el fondo de rocas de la playa de la Grava.