La Generalitat, las Corts Valencianes, la Diputación y ayuntamientos de toda la Comunitat han secundado hoy concentraciones de repulsa por el suceso de la localidad valenciana de Serra en el que falleció una mujer en el incendio de su casa, que está siendo investigado y por el que ha sido detenido su marido.

El Ayuntamiento de Serra había convocado también una concentración a mediodía ante la casa consistorial, que ha suspendido finalmente hasta que no haya un pronunciamiento judicial sobre el suceso y la situación del detenido, con el objetivo de no adelantarse a catalogar el suceso como un nuevo caso de violencia machista.

En la concentración de la Generalitat han acudido altos cargos del Gobierno valenciano, entre ellos el president, Ximo Puig, la vicepresidenta, Mònica Oltra, tres consellers y diputados de la corporación provincial de Valencia.

Oltra ha condenado y rechazado la muerte de la exconcejal, Dolores Moya, que ha extendido a "todas las mujeres y sus hijos que sufren al violencia en este país".

Diputados de Les Corts Valencianes de diferentes grupos parlamentarios se han adherido también a las muestras de rechazo por la muerte de la exconcejal, y se han concentrado durante cinco minutos en las puertas del Parlamento valenciano en solidaridad con los familiares de la víctima.

Miembros del Ayuntamiento de Valencia y trabajadores municipales se han concentrado también a mediodía en las puertas del Consistorio para condenar la muerte de la mujer, y han guardado un minuto de silencio.

El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha insistido en la necesidad de "trabajar en los mecanismos de prevención desde jóvenes" y desde los colegios, mediante elementos de "ética y valores" porque esta situación "hay que eliminarla algún día del mapa".

José Cholbi

El Síndic de Greuges de la Comunitat Valenciana ha mostrado su "más absoluta repulsa" por el presunto asesinato. José Cholbi ha afirmado que "lamentablemente" en apenas una semana se han conocido también los casos de violencia de género en otros puntos de España --Palma, Moraña y Castelldefels-- que han costado la vida a tres mujeres y a cuatro niños. Desde el Síndic se han unido a las voces de condena y han mostrado su "consternación" por estos "tristes y fatídicos" sucesos.

"Hoy más que nunca --ha añadido-- nos reafirmamos en nuestro compromiso de seguir trabajando con contundencia y firmeza para acabar con esta lacra". "La violencia de género es un grave problema en nuestra sociedad que exige una respuesta global y coordinada por parte de todas las personas que asumimos responsabilidades dentro de la administración", ha apostillado.