El desmantelamiento de una trama de explotación laboral a personas condenadas a labores en beneficio de la comunidad ha incluido la detención del exteniente de alcalde de Gilet, Salvador Ortí, y de, al menos, otras tres personas vinculadas con esta población. Se trata de tres de los cuatro impulsores de una entidad vinculada a la Fundación Vecinal Vicente Blasco Ibáñez, que tenía una de sus sedes en la que, al menos, entonces era Casa de Cultura de Loriguilla, de acuerdo con los documentos a los que ha tenido acceso el PSPV de Gilet. Estos detenidos son el presidente de la fundación, Vicent Andrés Arnedo Medina, Rubén Arnedo Araújo y Miguel Ángel Sánchez Isarria.

Se trata del organismo que, según los socialistas de Gilet, logró en esta última población una concesión «a dedo» para explotar el luego fallido «Parque de ocio Porta Calderona» en la parcela municipal reservada para el futuro colegio y que luego, de acuerdo con sus cálculos, dejó a deber unos 25.000 € en la población.

La entidad fue constituida el 23 de febrero de 2012 como «sociedad sin ánimo de lucro»; si bien luego fue la concesionaria del parque de ocio de Gilet, por más que al final fue una empresa vinculada a ésta a la que luego el consistorio le rescindió el contrato por un impago de 6.000 €, es decir, la mitad de la cantidad que ésta iba a abonar por gestionar el «centro de ocio» durante un año prorrogable.

De los cuatro fundadores de la entidad concesionaria de ese parque, tres han sido detenidos ahora por la Guardia Civil por esa supuesta trama de explotación laboral. Casualmente uno de ellos, al firmar aquel documento de constitución, también ofreció como dirección propia la sede de la casa de cultura de Loriguilla, siempre según los documentos en poder del PSPV de Gilet.

Junto a esos arrestados, entre los fundadores de esa sociedad estaba un viejo conocido en los ambientes taurinos de El Camp de Morvedre y del propio exalcalde de Gilet, el torero Juan Carlos Vera (PP). Ese empresario es, justamente, el responsable de una firma al que el exalcalde de Gilet, Juan Carlos Vera (PP), pagó unos 7.000 € poco antes de dejar alcaldía, en una operación luego cuestionada por el PSPV local. «Le pagaron por la retirada de pinos en la montaña de la ermita sin que hubiera contrato alguno, cuando la empresa ya se estaba beneficiando al llevarse gratis la masa forestal que retiraba, como hacen otras del sector», decían desde el PSPV local.

Mientras, el exteniente de alcalde detenido, dentro de esta trama, rechazó ayer a Levante-EMV su vinculación con la fundación desmantelada y aseguró que él sólo le donó material que iba a tirar de su antigua empresa para reutilizarlo, precisamente, en el luego fracasado parque de ocio de Gilet.