Aunque la mayoría de los clientes de los ahora detenidos eran empresas de compraventa de vehículos de segunda mano que querían tener información privilegiada sobre coches susceptibles de ser comprados y sus propietarios, los investigadores han comprobado que también había particulares que compraban informes. De momento, hay 16 imputados, pero se cree que serán bastantes más. Los compradores de información han sido localizados en Valencia, Alicante, Castelló, Madrid y otras provincias. t. d./m. B. valencia