Como si de personajes de un cuento de las «Mil y una noches» se tratase, cuatro jóvenes guardaban en una cueva de Xàtiva aquello que iban sustrayendo de diferentes viviendas. Se les atribuye hasta 60 robos, perpetrados en una urbanización de la capital de la Costera. Ahora, la Guardia Civil ha arrestado a tres de los implicados y ha imputado al restante. Dos de ellos son menores.
Las investigaciones arrancaron el pasado mes de julio, cuando una oleada de robos en esta urbanización desencadenó una gran alarma entre los vecinos. Los presuntos autores de estos hurtos aprovechaban que los propietarios o inquilinos de las viviendas no se encontraban en el interior de las mismas para adentrarse en ellas y sustraer todo lo que podían durante la noche: desde palos de golf hasta herramientas, pasando por ropa o relojes.
Realizaban el recorrido a pie desde Xàtiva hasta la urbanización. Tras perpetrar los robos, los sospechosos recorrían andando distintos senderos campo a través, por las montañas cercanas a la población, sendas que les llevaban a la cueva donde guardaban los objetos sustraídos.
Menores de 22 años
La «Operación Kumato», llevada acabo por agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Canals y Xàtiva, ha culminado con la desarticulación de la banda, que contaba con un claro cabecilla que en ocasiones realizaba los robos en solitario, según las investigaciones. Dos de los cuatro implicados son menores de edad, aunque solo tres han sido detenidos (el cuarto está imputado).
Los presuntos autores son de nacionalidad española y ucraniana y se les relaciona con delitos de robo con fuerza, de violencia e intimidación, de pertenencia a grupo criminal, de resistencia y desobediencia y de delito de amenazas de muerte. Sobre ellos también recaía una orden de búsqueda y detención, según señalaron fuentes del Instituto Armado. Ahora, los presuntos ladrones han pasado a disposición del Juzgado de Instrucción nº1 de Xàtiva.
